En lugar de apresurarse a ocupar una nueva silla en el directorio, las empresas deberían tomarse un respiro y determinar con precisión lo que quieren conseguir.
El CES de este año, un crisol de más de 130.000 entusiastas e innovadores de la tecnología, presentó más de 3.500 exposiciones que abarcaban todo el espectro del Ingenio humano.
Se acerca una nueva era de inversión, en gran parte gracias a que las empresas tradicionales se han dado cuenta del poder de la tokenización de activos.
Mediante la integración de tecnologías de IA en sus plataformas, las empresas innovadoras pretenden ofrecer experiencias de usuario mejoradas, agilizar los procesos y ofrecer soluciones de vanguardia.
