Ante la posibilidad de un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Ecuador y Japón, anunciado por el presidente Daniel Noboa, se abre un panorama para el fortalecimiento de las relaciones comerciales entre ambos países, marcadas en los últimos años por un déficit comercial de decenas de millones de dólares para nuestro país.
Históricamente, el mercado japonés demandó alimentos y materias primas. Las cifras más recientes corresponden al período enero-mayo 2025 y son reportadas por la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor) con datos del Banco Central. Los datos muestran qué bienes podrían dar al país una ventaja competitiva en caso de concretarse el TLC.
El camarón lidera las exportaciones con un valor de US$ 63 millones, lo que representa un crecimiento del 77 % frente al mismo período de 2024.
En segundo lugar está el brócoli, con US$ 40 millones y un incremento del 33 % respecto al año pasado.
El banano y el plátano, en tercer lugar, registran US$ 27 millones en exportaciones. Este rubro se mantiene en niveles similares que el año pasado.
El cuarto y quinto puesto lo ocupan el cacao en grano y sus derivados, con US$ 16 millones y US$ 7 millones, respectivamente. Estos envíos duplicaron su valor en el período anterior en comparación con 2023, y en los primeros cinco meses de este año también muestran un aumento, aunque más moderado: 54 % el cacao y 16 % los derivados.
En el sexto casillero se ubican las flores con US$ 4 millones y un crecimiento del 6 %. Le siguen alimento para animales (séptimo, con US$ 2 millones y una caída del 61 %) y los textiles (octavo, con US$ 2 millones y una disminución del 51 %).
Cierran la lista los minerales y metales y el café, ambos con US$ 1 millón, con repuntes de 100 % y 57 %, cada uno.
Con estos productos como protagonistas, la 'Nación del Sol Naciente' se ubica como el undécimo mercado de destino para las exportaciones no petroleras de Ecuador en lo que va de 2025, según un boletín del Ministerio de Producción, lo que evidencia un gran potencial para el futuro del sector.
Así, Japón podría convertirse en un aliado estratégico si se concreta el tratado, reforzando su importancia como mercado para la producción nacional. (I)