Empresas que cotizan en Bolsa impulsan una ola de operaciones con activos digitales, alimentando el negocio de custodios, brokers y gestores, que facturan millones con cada movimiento.
Aseguran que los pagos en comisiones a Apple y Google -propietarios de la App Store y Google Play respectivamente- suponen un gasto del 30% de todos los ingresos que la empresa recibe por las compras dentro de las aplicaciones.