Si sos como yo, tu teléfono suena todo el día con una sola llamada: un personaje dudoso que se presenta como "Probable Estafa". En serio, el spam telefónico se volvió una verdadera plaga. Los celulares no paran de vibrar con llamadas de ventas.
El Índice de Llamadas Robóticas de YouMail estimó que "los consumidores estadounidenses recibieron más de 4.800 millones de llamadas robóticas" solo en mayo, según la Cloud Communications Alliance.
¿Y después se sorprenden de que la generación Z y los millennials no atiendan el teléfono? Con tanta insistencia del spam, la mayoría ya está acostumbrada a ignorar cualquier número desconocido. O directamente a ese cobarde personaje que aparece como "Probable Estafa".
Esto representa un problema para las empresas que todavía dependen de la televenta. Pero, ¿qué tanto lugar tiene la llamada en frío en 2025? Veamos los números.
¿Sigue vigente la llamada en frío en 2025?
La empresa Martal.AI, especializada en generación de leads, publicó un informe con datos concretos sobre la utilidad comercial de las llamadas en frío. El trabajo dejó dos conclusiones claras: "Más del 50 % de los leads B2B todavía se originan mediante llamadas en frío en 2025, lo que las convierte en un canal fundamental en las estrategias de outbound" y "El 49 % de los compradores B2B prefiere ser contactado primero por teléfono, y el 82 % acepta reuniones mediante llamadas en frío, lo que confirma la disposición del comprador a recibir llamadas".
Martal.AI no es la única que destaca la efectividad del telemarketing. IBISWorld, firma de investigación y análisis de datos, estima que actualmente funcionan unas 50.000 empresas de telemarketing y centros de llamadas en Estados Unidos. Entre 2020 y 2025, el sector creció a una tasa anual compuesta del 4,9 %. Por su parte, Cognitive Market Research proyecta que "el tamaño del mercado global de telemarketing saliente alcanzará los US$ 11.524,8 millones en 2025".
Los números hablan por sí solos. Ahora bien, si tantas empresas siguen apostando por las ventas telefónicas, ¿qué pasaría si existiera una forma más efectiva de lograr que la gente atienda? Esa es la pregunta que TitanX busca responder con inteligencia artificial.
Llamadas en frío, pero con inteligencia artificial
Hace poco hablé con Joey Gilkey, CEO de TitanX, sobre un tema que viene ganando terreno. Mientras muchas empresas apuestan por agentes con inteligencia artificial para mejorar la atención en sus centros de llamadas, la suya va por otro camino: ayudar a las compañías a saber quién tiene más chances de atender una llamada de ventas.
Para eso, Gilkey y su equipo desarrollaron la Plataforma de Intención Telefónica. "La mayoría de las llamadas de spam se producen porque los representantes operan a ciegas", explicó. "Marcan a través de listas sin saber quién está realmente interesado, listo para comprar o dispuesto a recibir una llamada. TitanX soluciona este problema aprovechando modelos de IA entrenados con señales de comportamiento a nivel telefónico, como patrones de actividad telefónica, correlación entre la actividad del consumidor y la del negocio a nivel personal, y cambios tecnológicos para evaluar a los clientes potenciales según su verdadera intención", agregó.
Una forma de entender este filtrado de precisión con datos en tiempo real es a través del triaje, ese concepto bien conocido en el mundo médico. En una guardia, los profesionales deben decidir a quién atender primero. Si trataran a todos por igual, el sistema colapsaría. No es lo mismo una mujer embarazada en pleno trabajo de parto que una persona con síntomas de gripe. Ambas necesitan atención, pero la urgencia es distinta. Y lo mismo pasa con las llamadas: no todos los contactos tienen la misma prioridad.
La diferencia de un filtro con inteligencia artificial
Volvamos a TitanX. Su plataforma funciona como un filtro inteligente: decide a quién conviene llamar y, sobre todo, a quién no. Pero además, la inteligencia artificial le da una mano a los representantes de ventas con otras herramientas. Por ejemplo, detecta cuándo una persona muestra señales de estar disponible, lo que permite hacer el contacto justo en el momento más oportuno.
Gilkey lo explica con una metáfora bastante clara: "Imaginá que tu lista de ventas es un pajar. Dentro de ese pajar hay algunas agujas", dice. "Esas agujas son las personas que realmente van a contestar el teléfono. Hoy los representantes van paja por paja, llamada por llamada, con la esperanza de encontrar una. La IA de TitanX es la primera que filtra el pajar y te entrega directamente esas agujas valiosas", comenta.
Desde el lado técnico, la plataforma trabaja con 12 señales propias. Cruza datos de telecomunicaciones, comportamiento del consumidor y características B2B, entre otros factores, para responder tres preguntas clave que pueden acelerar una conversión:
- ¿Es el número correcto de la persona?
- ¿Ese número está activo?
- ¿Esa persona suele atender llamadas de números desconocidos?

Con toda esa información, TitanX genera una única puntuación: Alta Intención. Ese número es el que necesita saber cualquier vendedor para detectar rápido a los contactos que tienen más chances de escuchar una propuesta.
La personalización, el arma secreta en ventas
La Plataforma de Intención Telefónica es solo un reflejo de una tendencia más grande: la personalización. El mejor ejemplo, quizá, esté en el marketing.
Antes de que existieran las redes sociales, las empresas solían apostar a métodos más a prueba y error para dar a conocer sus productos. Pensemos en la publicidad en los diarios. Años atrás, un estudio podía pagar un anuncio a página completa para promocionar una película. Aunque la agencia tuviera una idea general sobre la circulación y la cantidad de lectores, no se acercaba ni por asomo a la precisión que hoy ofrecen plataformas como Facebook, capaces de segmentar audiencias al detalle.
Hoy, el marketing permite crear campañas hechas a medida para cada perfil. Se pueden probar distintas versiones con pruebas A/B, usar audiencias similares y medir en tiempo real la interacción con los anuncios: tasas de clics, impresiones y otros datos que ayudan a ajustar cada estrategia. Nada queda librado al azar. Las decisiones se toman con datos concretos, y eso hace que las chances de convertir un contacto en cliente sean mucho más altas.
El futuro de las llamadas de ventas
La propuesta de la Plataforma de Intención Telefónica no es solo una táctica puntual para encontrar prospectos más dispuestos a atender. Es parte de un cambio más profundo en la forma en que las áreas comerciales buscan mejorar el contacto saliente.
Cada vez que alguien —me incluyo— decide ignorar una llamada que suena a spam, consciente o no, le está mandando un mensaje bastante claro a las empresas: su discurso no funciona.
En vez de seguir tirando llamadas al aire y cruzar los dedos, las compañías que miran hacia adelante deberían apostar a mejorar su juego. Y eso incluye entender que la personalización no es una moda: es lo que da resultados. Lo prueban los miles de negocios que pasaron del correo directo al marketing en redes sociales, dejando atrás estrategias viejas que, además de ineficaces, pueden dañar la imagen de marca.
La inteligencia artificial está cambiando la lógica de las llamadas de ventas. Al identificar con más precisión quién tiene chances reales de responder, las empresas pueden conectar con quienes sí están interesados, sin ir a ciegas. Herramientas como la Plataforma de Intención Telefónica muestran hasta dónde se puede llegar cuando la tecnología trabaja a favor de mejorar la experiencia humana.
Si la personalización escala como prometen estas soluciones, las llamadas en frío podrían dejar de ser una molestia masiva y transformarse en algo útil. Y con algo de suerte, esa persona del otro lado del teléfono, a la que tanto costó llegar, diga que sí.
Con información de Forbes US