Luiz Gomes asumió la presidencia ejecutiva de Continental Tire Región Andina a inicios de 2023, después de pertenecer más 10 años a esta compañía de origen alemán. Esta posición viene acompañada de grandes retos, no solo laborales, sino también personales. Gomes dejó su ciudad natal São Paulo, Brasil, junto a su esposa y sus dos hijos adolescentes, para emprender su primera aventura en el extranjero. Arribaron a Ecuador en septiembre de 2021, llenos de grandes expectativas y dudas sobre cómo sería su vida en Quito. "Antes de venir estábamos invadidos de emociones y nos preguntábamos dónde íbamos a vivir, cuál sería el colegio de nuestros hijos, cómo nos iban a tratar, cómo iba a encontrar la empresa… Sin duda, el tema cultural fue un gran cambio para mi familia porque aquí no hay muchos brasileños y allá tampoco hay muchos ecuatorianos".

Nos recibió en su nueva oficina y nos comentó que en estos casi dos años aprendió a querer las maravillas de Ecuador. "Todos los fines de semana buscamos un restaurante nuevo o recorremos sitios cercanos. Pasamos fin de año en el Puyo y pude conocer la Amazonía, nunca lo había hecho desde el lado brasileño. Fue una tremenda experiencia y algo que no podremos olvidar". Habla perfectamente español y se ha acoplado muy bien a las costumbres nacionales; menos a los temblores, algo que no existe en Brasil (dice entre risas).

En un inicio, Gomes fue responsable del Área Comercial para los seis países que conforman la Región Andina: Ecuador, Colombia, Perú, Bolivia, Venezuela y Chile. Su amplio background le permitió ser el candidato perfecto para liderar esta área desde la base central (Quito). Tiene más de 14 años de experiencia en funciones administrativas y trabajó 10 años como gerente de Contraloría y Administración Comercial en el Grupo Comolatti, uno de los distribuidores de autopartes más grandes de América Latina. Después, ocupó el cargo de contralor, por cinco años, en su primera multinacional, ZF Friedrichshafen. Cuando ingresó a Continental Tire pasó de la parte financiera al negocio per se.

Hoy, con la responsabilidad que asumió en enero de este año, está a cargo de un equipo de 100 personas en la parte comercial y más de 1.000 en la planta de producción en Cuenca. Siempre ha estado relacionado con esta industria y -para él- no hay nada más emocionante que trabajar con la velocidad, la adrenalina y la seguridad de un producto automotor, como son las llantas que producen en el sur del país. "No era algo que quería hacer desde niño, pero mi formación en Finanzas me ayudó a incursionar en diversos sectores". 

Estudió Administración de Empresas en la Universidad São Judas Tadeu y tiene dos MBA's en la Universidad de São Paulo y en la Fundación Getulio Vargas, respectivamente. En su tiempo libre le gusta jugar tenis, caminar y encontrarse con sus amistades, la mayoría ecuatoriana. "Lo que más me ha ayudado con el idioma es convivir con mis colegas y amigos, quienes me han recibido con cordialidad y amabilidad". Con respecto a la parte laboral, este ejecutivo afirma que tiene muchos retos y su secreto es no dormir (nos confiesa, con una carcajada). Ha logrado mantener el equilibrio y liderar a seis países con la verdad y la justicia. "Cada mañana me despierto buscando lo mejor para mi familia, para Continental y para toda la comunidad".

Según Gomes, no fue fácil cambiarse el chip de financiero (reportaba todo lo que sucedía en la empresa) a comercial (donde se crean los números que llenan esos reportes). Ahora, tiene el poder de crear negocios y todo su conocimiento lo está aplicando en su estrategia de crecimiento anual. "Esto es algo nuevo y mucha gente está involucrada. Me siento la cabeza de una operación vencedora, con más 70 años de historia en el país. Nosotros creamos más de 5.000 empleados indirectos y tengo la obligación de hacer algo relevante y de cuidar el tremendo legado que se ha construido en este país".

En Ecuador existen dos ejes principales de desarrollo. El primero es defender la participación de la marca en el mercado, ya que -si se compara con una década atrás- se ha reducido con respecto a la competencia. "Esto es el resultado del nivel de importación. Somos la única empresa que tiene su producción aquí y la competencia está trayendo llantas de China, donde existen otras condiciones de competitividad. La gente debe saber que pagar un 5 % o un 15 % más vale la pena por un producto seguro y que ofrece la mejor garantía. Por eso queremos enfocarnos en la educación vial, que se conozcan los riesgos y los peligros de usar llantas de mala calidad".

El segundo eje es prepararse para exportar más. Su producción anual es de 1,4 millones de llantas livianas y 300.000 de camión. Actualmente, se exporta entre el 50 % y el 60 % de esos productos a Estados Unidos, México, Colombia y otros países de la región, por lo que esperan cerrar la facturación de este año en US$ 165 millones. ¿Cómo planean lograrlo? Cuentan con una estrategia fuerte de comunicación y quieren dar a conocer toda la tecnología, el diseño, el control de calidad… que tienen en su fábrica. "Una llanta puede ser la diferencia entre la vida y la muerte en una carretera mojada o en una curva cerrada, no solo depende del rendimiento del vehículo. Nosotros contamos con inversión nacional y ADN alemán, la combinación ideal. Por ese motivo, mi mayor reto personal es elevar esa comunicación para que las personas hagan la mejor inversión para sus familias".

Con 46 años, Gomes asegura que la sociedad ecuatoriana tiene hambre de cosas buenas y cada vez está más influenciada por la innovación y la calidad. Es así que, Continental Tire, está apostando por competitividad y espera invertir US$ 13 millones extras, en los próximos cinco años, para prepararse para el futuro. "Tenemos una base de valores muy fuertes, promulgamos la pasión por ganar y la confianza en todas las relaciones. Por ejemplo, vamos a reducir al 100 % nuestra huella de carbono hasta 2050".

Este brasileño, con su carisma, ha logrado consolidar un buen ambiente laboral, que fusiona lo rico de las culturas, no solo extranjeras, sino también nacionales. En esta compañía, como dice Gomes, se ha sentido como en casa y desde que pisó nuestro territorio es uno más de nosotros. (I)