Lo primero que llama la atención a Juan Carlos Navarro es la cámara marca Nikon con la que el fotógrafo lo enfoca. Es la misma marca que usa cuando este amante de la vida silvestre e instructor de buceo hace observación de aves. Aunque desde finales de febrero de 2025, cuando asumió la presidencia de la Cámara de Industrias de Guayaquil (CIG), sus aficiones están descansando por la intensa agenda de reuniones y compromisos gremiales que se multiplican, y, además, el 12 de mayo fue electo presidente del Comité Empresarial Ecuatoriano (CEE), que aglutina a 155 gremios productivos.
Ha identificado casi 900 aves desde 2017 cuando se sumó a la legión de fanáticos. Empezó a descubrir esta afición en una visita a Mindo (Pichincha) en un conteo navideño de aves. En su cuenta de wildlife.jcn de Instagram tiene la muestra fotográfica del avistamiento de aves y sus viajes a todas las reservas y parques naturales de Ecuador. También tiene otra cuenta sobre la vida submarina. En 2020, con un grupo de amigos realizó viajes a varias comunidades para impulsar el turismo local durante los meses de pandemia. Es un nature lover y podemos pasar muchas horas hablando de sus aventuras.
Con gran sentido del humor, le cuenta a Forbes Ecuador cómo colgó su cámara fotográfica por ahora para atender la agenda gremial. El día de la entrevista, lunes 2 de junio, estuvo a primera hora reunido, con otros presidentes de cámaras, con el ministro de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, Luis Alberto Jaramillo, quien les informó las cinco decisiones del Gobierno en temas de retiro de subsidios, tasa y catastro minero, y auditoría a empresas públicas.
Juan Carlos Navarro (60 años) estudió ingeniería civil en la Universidad Católica Santiago de Guayaquil, estudia una maestría en Administración de Empresas. Tiene más de 35 años de trayectoria empresarial, es gerente general de Lecroy, una empresa de pastas, y ha estado vinculado a multinacionales. Fue vicepresidente ejecutivo de Millenium Corp en República Dominicana, y director Comercial para el Caribe en Hunter y lideró la expansión de la compañía.
Me acaba de contar que es submarinista, fotógrafo, observador de aves, viajero, y que no ha parado desde que asumió la presidencia en la Cámara de Industrias de Guayaquil, ¿qué pasó?
No he parado y extraño todo lo que dejé antes. Tengo una pequeña fábrica de pastas, un negocio familiar, que tiene como 60 años, y la mantengo todavía porque de algo se tiene que vivir. Está a cargo una persona excelente, jefe de oficina, y fue la primera a quien consulté cuando me propusieron ser presidente de la Cámara de Industrias de Guayaquil, después le pregunté a mi esposa (se sonríe).
¿Qué más hacía antes de ser dirigente gremial?
Fui a vivir en 2006 hasta a finales de 2010 a República Dominicana. Era gerente de exportaciones del Grupo Eljuri, del área de la cerámica, y recibí una propuesta de Lojack, la empresa que hace recuperación de vehículos, para ser director comercial para el Caribe, donde incluía República Dominicana y Puerto Rico. Me fui con base en Santo Domingo, hasta que en 2008 me trasladaron a Puerto Rico. Pero en 2010, me regresé a Santo Domingo a ser vicepresidente de un grupo de inversión, bienes raíces, minería, fue el mejor año de mi vida.
¿En qué momento está el empresariado ecuatoriano?
Hay que hacer una división. Políticamente hablando, creo que estamos en un buen momento por las relaciones que tenemos con el presidente (Daniel Noboa), con los diferentes ministros, por ese optimismo que se respira desde el lado del Gobierno de que las cosas se pueden lograr. Y desde el punto de vista empresarial es complicado, porque hemos vivido momentos muy duros en seguridad, poca inversión extranjera, una situación económica muy difícil. Entonces, es un contraste, pero sí compartimos con el Gobierno ese optimismo, que juntos podríamos crear empresas público-privadas que puedan sacar adelante el país.
¿Cuáles son las expectativas para este nuevo periodo de cuatro años del presidente Daniel Noboa?
Que nos permita ayudar, que nos permita ser parte de eso, que nos permita estar en mesas técnicas donde podemos dar ideas. Creo que podemos coincidir en el 90 % de los objetivos con el Gobierno. Claro, como presidente tiene que priorizar esos objetivos en tanto y en cuánto sea una conveniencia a nivel nacional porque sabe mejor que nadie lo que más le conviene al país. Podemos coincidir en muchos objetivos, diferir en los cómos, y es ahí donde podemos aportar. Pero concentrémonos en conversar.
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¿Qué es lo que le conviene al Ecuador en estos momentos?
Que coincidamos en la mayoría de los objetivos. Empezando por generar inversión, por ejemplo. También queremos que vengan inversionistas, pero tenemos que crear los pasos previos. Tenemos que ir creando un ambiente laboral, jurídico, tributario para que vengan estos inversionistas y nos encuentren atractivos, como encuentran a Perú, o Colombia.
¿Qué garantiza que eso se cumpla, que Gobierno y dirigentes empresariales logren una alianza público-privada que es necesaria?
De la voluntad que tenga el político en general. No hablo de este presidente, hablo en general, la voluntad política, donde uno tiene que priorizar lo que le conviene al país contra lo que le conviene a mi partido. Lo que le conviene al país contra lo que me conviene a mí como persona. Creo que ni el presidente Noboa ha sido elegido para ser el hombre más simpático del Ecuador, ni yo estoy aquí para ser el hombre más agradable para todos los empresarios. Él está para hacer lo que tiene que hacer en favor de todos los ecuatorianos, a pesar de que su imagen se pueda afectar, y yo para representar los objetivos de los empresarios.
El Gobierno ya anunció las primeras decisiones que tienen que ver con la eliminación del subsidio al diésel para los atuneros, tasa y censo minero, y la revisión de tarifa eléctrica para grandes industrias, ¿eso fue consensuado, conocían ustedes?
No, de hecho fue anunciado (el lunes 2 de junio) en una reunión en la que estuvimos con diferentes ministros, y entre las cosas que se hablaron, por ejemplo, los sectores de pesca, agricultura, camarero se quedaron en una reunión con el ministro Jaramillo para ver cómo pueden buscar paliativos para mitigar la falta de subsidios, como la libre importación de diésel, afuera cuesta US$ 2,50, Petroecuador lo vende en US$ 3,08, y cada sector se tiene que sentar para conversar. Entiendo que el país necesita eliminar subsidios porque no tiene ingresos, pero si no puedo generar más negocios porque pierdo competitividad, mis costos se están elevando, vamos a perder los dos.
Los empresarios nunca han estado de acuerdo en que se eliminen los subsidios a los combustibles, sobre todo.
Me eliminan el subsidio, pero no puedo comprar directamente, tengo que comprar a Petroecuador, que le pone un precio de venta que tiene todos los costos operativos de la carga de ineficiencia de la empresa. Creo que hay que tomar medidas, pero hay que cambiar leyes.
¿Y en el tema de las tarifas eléctricas para grandes industrias?
Saliendo de la reunión nos llegó la comunicación del incremento en las tarifas. No nos hemos sentado todavía con el ministerio para que alguien nos diga en base a qué se tomó la decisión. Son las A1 y A2, 150 industrias, que son entre 35 % y 40 % de consumo, ya que el mayor consumo es residencial. Pero tenemos que ver qué medias compensatorias vamos a tener.
El presidente Noboa dijo en días pasados 'La empresa privada es un aliado clave, queremos trabajar con ustedes antes de tomar decisiones estructurales', ¿cómo se encamina eso?
Es correcto, así lo dijo. Y para eso estamos nosotros. Vamos a sentarnos con el ministro y ver qué más podemos hacer. ¿Qué vamos a hacer para compensar? ¿Cómo vamos a ayudar al sector empresarial para que ese hueco que va a quedar sea compensado? Por ejemplo, el sector atunero pedía la liberación de impuestos en todo lo que tiene que ver en la compra de repuestos para sus maquinarias o accesorios para su sistema de producción.
Para el presidente la economía "está bastante estable", ahora el enfoque es generar empleo, ¿cómo la empresa privada va a aportar?
Bueno, nueve de cada 10 empleos son aportes de la empresa privada, que es muchísimo.
¿Entonces qué corresponde hacer ahora?
Generar más empleo. ¿Quiénes vienen a invertir acá? Aquí puede haber inversión nacional y lo deseable es que haya inversión extranjera. ¿Pero bajo qué parámetros o incentivos? Voy a poner un ejemplo, alguien me decía 'escuché que ustedes tienen una obligación de jubilación patronal que no hay en otros países' y eso es un límite para los inversionistas. El presidente habló de que no va a haber incentivos tributarios para los contratos de inversión porque tiene cifras que demuestran que no se ha creado más empleo. Pero no creo que sea tan general, se podría ir hablando caso por caso, pienso que sí va a haber casos donde amerita. Por ejemplo, creación de más zonas francas, va a generar definitivamente que puedan venir más inversionistas a instalar más fábricas,
¿Cómo Ecuador se hace más atractivo?
A ver, si yo estuviese soltero, no salgo a la calle despeinado, mal vestido, voy a tratar de ponerme la mejor ropa que tenga y el mejor peinado para tratar de buscar una chica con la que me pueda enamorar. Exactamente lo mismo es lo que tiene que hacer el país, ponerse bonito, adecuarse para tratar de buscar que vengan inversionistas que lo vean atractivo y que quieren invertir.
¿En la práctica qué tiene que hacer el país para mostrarse atractivo ante los inversionistas?
Por ejemplo, generar seguridad laboral, seguridad jurídica, incentivos tributarios reales, que vayan de la mano con la inversión.
Entonces, los incentivos tributarios sí son necesarios, pero en función de que den resultados como empleo.
Exactamente, y eso es medible. Eso lo hace la empresa privada, quiero crear una segunda línea de producción, pero primero cuánto es el gasto que voy a tener, cómo me voy a apalancar para generar esa inversión, en qué tiempo espero recuperarla y cuál es el monto que me va a dar en rentabilidad y voy poniendo KPI's, que me va a permitir ir midiendo hasta que vea la rentabilidad.
¿Cuál es la expectativa sobre las giras presidenciales para buscar inversiones?
Puedo hablar con conocimiento de causa, fui gerente de exportaciones de Ecuacerámica. El Ecuador no existe en el mapa económico mundial como una potencia a la que todos los países vean para invertir o para hacer negocios. Eso no es la realidad, quisiera que fuera. Cuando yo estaba manejando las exportaciones, si no viajaba y tocaba la puerta a un país diciéndole: 'Hola, fulanito, mira esto, acabo de llegar para visitarte'. Me decían: 'Mira, Juan Carlos, qué casualidad, justo estaba pensando en ti'. Y salía con un pedido, si yo no viajaba no me llamaban.
¿Hay que fortalecer las oficinas comerciales en otros países?
Sí, eso es parte de lo que está haciendo el presidente, y lo sé por porque he conversado con la canciller Sommerfeld que está haciendo un excelente trabajo. Pero también se necesita dinero para mantener esas oficinas comerciales. Y me parece hasta injusto cuando veo las críticas que le hacen al presidente sobre sus viajes.
¿Y cuáles serían los principales proyectos que vendería?
Más allá de los productos tradicionales, fuera del petróleo, tenemos, cacao, flores, también hay muchas cosas que se pueden ofrecer, artesanía, mano de obra.
Por ejemplo, ¿qué mejor sería que llevarle la idea de que tenemos un espacio donde pueden maquilar de forma económica para atender el mercado americano? República Dominicana tiene un hub impresionante de servicios, tecnológico, vendamos esta idea de tener una zona franca en Ecuador.
¿Existe la normativa para eso?
Creo que sí, pero hay que trabajar y mejorarla. Tenemos muchos candados en esta Constitución que tienen que ser rotos. La Constitución es demasiado estatista, proteccionista, garantiza muchos derechos, pero no obligaciones.
¿Han definido una hoja de ruta conjunta con el Gobierno?
Estamos en eso, el mismo presidente nos dijo 'quiero reunirme con ustedes' y estamos coordinando para fin de mes. En ese momento, cuando el presidente venga, y a nivel empresarial estemos todos representados, los directores van a tener la oportunidad de presentar sus propuestas. Como Cámara de Industrias hicimos un acuerdo con la UEES para generar un espacio de think tank a donde se están invitando a economistas y abogados, y se trabajará en qué se puede hacer para mejorar el Código Laboral, mejores políticas económicas, nos vamos a sentar con las mejores mentes.
¿Cuál es entonces es el compromiso de la empresa privada en estos momentos en que el país requiere de todos los esfuerzos?
Estamos con las manos abiertas para recibir al Gobierno, a cualquier asambleísta, o político que quiera sentarse a conversar seriamente de cuáles son las propuestas que creemos que se deberían hacer para mejorar el tipo de inversión. Porque a nosotros es que nos tocan las puertas los inversionistas privados a decir, 'oye, me gustaría hacer esto. ¿Qué te parece? ¿Qué piensan ustedes?' Porque una cosa es el negocio Gobierno a Gobierno, que está sujeto a tratados. Pero acá estamos hablando de empresas privadas, somos los que tenemos el know-how de la experiencia que nos ha adoptado la empresa privada y lo que creemos por intuición que se puede hacer más adelante, porque eso es realmente la empresa privada. (I)