Con una amplia trayectoria profesional en Turismo, Andrés Terneus se arriesgó a crear una empresa enfocada en el alquiler de vehículos para clientes latinoamericanos. El objetivo es mejorar los precios a los que se encuentran en portales, en la web e incluso en las páginas oficiales de las rentadoras de automóviles.
Terneus llegó a las oficinas de Forbes Ecuador con un outfit de ejecutivo moderno. Relajado y jovial cuenta que su vida profesional empezó a los 18 años en Destino Travel, una empresa familiar. Hacía de todo, escalando poco a poco posiciones hasta que en 2014 asumió la Gerencia General. Graduado en Administración de Empresas y Hospitalidad por la Universidad San Francisco de Quito (USFQ), obtuvo en 2010 una Maestría en Negocios Internacionales en la Universidad de las Américas (UDLA).
Comenta que cada vez es más complejo el tema de la boletería para las agencias de viajes, las comisiones son más reducidas y la competencia más dura. "Los costos en regulaciones y el trabajo operativo para emitir un boleto, para su cambio o anulación no se correspondían con los ingresos que estábamos consiguiendo. En 2019 cerramos con ingresos anuales de US$ 150.000. por eso decidimos poner en stand by el negocio".
Frente a este complejo panorama, el ejecutivo quiteño le apostó a un nuevo emprendimiento en el mismo mundo del Turismo, porque conocía el mercado, pero, sobre todo, las falencias que los clientes atravesaban en la mayoría de los viajes. "Cuando uno renta un vehículo, ya sea en línea o con las mismas oficinas de las empresas de alquiler de vehículos, siempre te encuentras con sorpresas al momento de recoger el auto: seguros incompletos, no se añadió a un segundo conductor o cargos adicionales que te elevan el presupuesto planificado y en muchos casos echan a perder las vacaciones".
Enseguida se contactó con un amigo de la infancia y le propuso ser socios. Él ingresó con 8 %, su mamá con 2 % y él con 90 %. La primera inversión para constituir Global Rental Car Center, una aplicación de Whatsapp, que ofrece servicios personalizados en el alquiler de vehículos, fue de US$ 50.000. Sin perder tiempo, establecieron contacto con las principales rentadoras de autos como Hertz, Sixt, Álamo, Avis, Budget, entre otras. Enseguida consiguieron los primeros clientes, que se multiplicaron de boca a boca. "El cliente paga directamente a la rentadora del auto, nosotros ganamos un porcentaje, entre 15 y 20 %. La comunicación es a través de un número de Whatsapp. Tomamos los datos, filtramos la información y les enviamos dos o tres opciones. Así, el cliente sabe que, cuando llega, no tendrá inconvenientes y el valor establecido en la reserva es total y final, con todos los ítems mandatorios según las regulaciones de cada país".
La intención de Terneus es convertir a Global Rental Car Center en la primera empresa especializada en alquiler de autos para clientes de Latinoamérica. La pandemia les dio el empujón que necesitaban para conseguirlo. En 2021 hubo un boom de viajes, especialmente a EE.UU., por el tema vacunas; de tres o cuatro reservas diarias pasaron a 20 por día. En 2022, el promedio de reservas en más de 80 destinos en 23 países, especialmente EE.UU. y Europa fue de 4.000 anuales. Además de Ecuador tienen clientes de Colombia, Perú, Argentina, Uruguay, México y Costa Rica. El año cerraron con una facturación de US$ 1,5 millones.
"El secreto es el servicio personalizado, nos demoramos máximo cinco minutos en responder y entregar la información. Todavía no somos una fintech, no queremos perder la comunicación directa con el cliente, pero estamos analizando la instalación de un software que nos permita crecer un 50 %".
Este ejecutivo de 40 años viaja por lo menos seis veces al año a Miami, EE.UU. La empresa empezó con dos personas y ahora son seis. Aficionado a jugar pádel, si los sueños no le fallan en este 2023 abrirán operaciones desde Colombia y conseguirán una facturación de US$ 2 millones. (I)