UBS Group, tras la adquisición de emergencia del banco Credit Suisse, planea llevar a cabo recortes masivos de empleos que afectarán a más de la mitad de los 45.000 trabajadores de la entidad absorbida a partir del próximo mes.

Las personas familiarizadas con el asunto contactadas por Bloomberg señalaron que los banqueros, comerciantes y personal de apoyo del banco de inversión de Credit Suisse en Londres, Nueva York y en algunas partes de Asia serán los más afectados por los recortes, ya que prácticamente todas las actividades están en riesgo.

Los empleados han sido informados de que se esperan tres rondas de recortes este año, la primera de las cuales se espera a finales de julio, seguidas de dos rondas adicionales planeadas tentativamente para septiembre y octubre. Estas reducciones de empleo forman parte de los esfuerzos de UBS para ahorrar aproximadamente US$ 6.000 millones en costos de personal en los próximos años.

Se estima que UBS tiene la intención de reducir en última instancia alrededor del 30%, o 35.000 empleos, de la plantilla total combinada. Este número coincide con la proyección realizada por los analistas de Redburn en un informe reciente sobre la compañía suiza.

La adquisición de Credit Suisse por parte de UBS se produjo después de la pérdida de US$ 5.500 millones en el escándalo de Archegos Capital Management en 2021, y UBS ha dejado claro desde el principio que tiene la intención de reducir drásticamente las operaciones deficitarias de Credit Suisse en el sector de banca de inversión.

Aunque UBS había planeado inicialmente mantener al 20% de los mejores operadores de Credit Suisse, muchos de ellos ya se han marchado o han sido contratados por competidores. En cuanto al negocio suizo, UBS tomará una decisión en el tercer trimestre sobre si integrar completamente la unidad nacional de Credit Suisse en su propia unidad o buscar otras opciones.

Las primeras rondas de reducciones de empleo probablemente excluyan los puestos relacionados con la superposición en las empresas suizas. En total, podrían eliminarse hasta 10.000 empleos si las dos compañías nacionales se fusionaran por completo. El destino de la unidad suiza de Credit Suisse es ampliamente seguido por empresas y políticos en el país europeo.