Los gremios de los sectores productivos, exportadores, comercio, agropecuario, textiles, entre otros, tienen una sola postura: La Asamblea Nacional debe ratificar el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Ecuador y China. El pedido lo hicieron el martes 6 de febrero de 2024, reunidos en Guayaquil, y vía telemática, donde solicitaron a los asambleístas aprobar el acuerdo con el gigante asiático. 

El acuerdo permitirá incrementar en más de 50.000 nuevos empleos y aumentar de 19 % hasta 32 % las exportaciones en los primeros cinco años del acuerdo y generar más de US$ 1.500 millones inmediatamente en las ventas a China, que es la segunda economía más grande del mundo, con 1.400 millones de habitantes. 

José Antonio Camposano, presidente del directorio de la Corporación de Gremios de Exportadores (Cordex), sostuvo que el acuerdo comercial debe considerarse como “una situación de carácter nacional, de política pública de Estado”. Además considera que el TLC con el gigante asiático permitirá abrir las puertas para otros tratados que están en camino como Canadá, Corea del Sur, Costa Rica, entre otros.

“Tiene que ser una política pública, no sólo de una porción de la sociedad, tiene que ser el Ejecutivo, Legislativo, todos los sectores, la Corte Constitucional dio el dictamen favorable. Los sectores empresariales, agropecuario, textiles, estamos a favor de la apertura comercial. No miremos esto como un acuerdo comercial con China, una postura de ciertos sectores, o con cierto país. Ecuador debe ver el mundo como un mercado al cual llegar para que le permita crear más plazas de trabajo y que se puedan traer productos que alimenten los puntos de ventas en las ciudades del país. Es un círculo virtuoso de apertura comercial”, señaló.

El acuerdo fue firmado en mayo de 2023 por ambos países, posteriormente recibió el dictamen favorable de la Corte Constitucional. Y estuvo a la espera de la reinstalación del Legislativo, tras la muerte cruzada, para su revisión y ratificación. El 5 de enero de 2024, la Comisión de Relaciones Internacionales y Movilidad de la Asamblea Nacional emitió el informe que recomienda “aprobar” el acuerdo. Y para este miércoles 7 de febrero de 2024 está previsto que el tema sea tratado por el pleno. 

China es el principal socio comercial de Ecuador desde 2022. Entre enero y octubre de 2023, las exportaciones no petroleras sumaron US$ 4.594 millones. 

Los empresarios reiteraron que el documento del TLC con China recogió ampliamente las posiciones de los diversos sectores productivos y “permitirá abrir la puerta al mercado más grande del mundo para nuestros productos, sin afectar a la industria local”. 

Algunos efectos del TLC entre ambos países es que permitirá la exportación de nuevos productos ecuatorianos como pitahaya, guayusa, yuca, tagua, borojó, palmito y arándanos. 

Habrá una desgravación arancelaria de productos ecuatorianos que se exportan a China. 0% de forma inmediata para: atún, sardina, plátano. A cinco años: cacao, rosas. A 10 años: camarón, banano, flores preservadas, café, entre otros. 

El acuerdo precautela los sectores sensibles de la industria ecuatoriana. Se excluyen 828 subpartidas arancelarias de la industrial textil, de calzado, metalmecánica, línea blanca, entre otros. 

Camilo Ontaneda, presidente ejecutivo de la Asociación de Industriales Textiles del Ecuador, dijo que el acuerdo tomó en cuenta un significativo porcentaje de exclusiones para productos altamente sensibles del sector textil y confección. “De las 849 subpartidas correspondientes a la industria textil, 509 subpartidas están excluidas. Esta exclusión se fundamentó en la existencia previa de producción nacional consolidada y la marcada competitividad de China. El resto de productos tienen un cronograma de desgravación arancelaria que se extiende a lo largo de 17 y 20 años”.

Cynthia Mayer, presidenta del directorio de Fedexpor, recordó que los países de la región que tienen acuerdos con China, han logrado crecer sus exportaciones y que el sector exportador del país neecsita este TLC. “No lo podemos hacer (crecer) sin este acuerdo, con una economía dolarizada y con dificultades para poder ser competitivos, los acuerdos son básicos para lograr ese crecimiento”.

 Para Mayer, que Ecuador pueda decir que ya tiene un tratado firmado con China, “abrirá las puertas a nuevas negociaciones” como Canadá, y recordó que ya está cerrado el acuerdo con Corea del Sur y Costa Rica. “Tenemos que dar esta respuesta positiva, estamos abiertos y preparados para competir en mercados internacionales y diversificar la oferta exportable”.

Francisco Jarrín, presidente de la Cámara de Industrias de Guayaquil, añadió que la Asamblea debe ratificar el acuerdo, ya que abre la “oportunidad única” para los ecuatorianos a un mercado gigante y beneficiará al 99,6 % de la oferta exportable del país. También destacó que el 77 % de las importaciones chinas son materia prima, insumos y maquinaria y con el acuerdo ingresarán libre de aranceles. 

Por su parte, Kléber Siguenza, presidente de la Cámra de Agricultura de la Segunda Zona, destacó que el TLC ha sido negociado de la manera “más apropiada” y consultando a los sectores “Es importante que la Asamble Nacional deje de lado posiciones ideológicas y de intereses particulares”. (I)