La Organización Trump registró en 2025 la mayor solicitud de mano de obra extranjera desde que existen datos oficiales del Departamento de Trabajo de EE.UU.. La compañía pidió 184 trabajadores para cubrir tareas temporales en Mar-a-Lago, dos clubes de golf y una bodega ubicada en Virginia. El número superó con amplitud los pedidos de años anteriores y expuso la dependencia de la empresa del presidente Donald Trump de este tipo de personal.
Los registros oficiales mostraron que la empresa impulsó este año el uso de visas H-2A y H-2B, categorías destinadas a tareas rurales y servicios estacionales. Los salarios informados quedaron entre US$ 15,58 y US$ 27,91 por hora para puestos de camareros, personal de cocina, limpieza, ventas y trabajadores rurales. La tendencia mostró un crecimiento sostenido en los pedidos: la compañía pidió 121 empleados extranjeros en 2021 y avanzó hasta el récord de 184 en 2025.
Durante los cinco años del mandato de Trump, la empresa apuntó a contratar al menos 566 trabajadores provenientes de otros países. Y si se toma el registro completo disponible desde 2008, la cifra asciende a 2.033 trabajadores solicitados.
La empresa evitó dar explicaciones sobre el incremento. Los voceros no respondieron consultas y la Casa Blanca decidió no emitir comentarios.
El propio Trump defendió el martes el uso de visas laborales durante una entrevista en "The Ingraham Angle", en Fox News. Aunque su empresa utiliza visas H-2A y H-2B, el presidente habló sobre las visas H-1B, orientadas a perfiles altamente calificados en áreas como ingeniería y contabilidad. Argumentó que estas categorías permiten sumar personas con "ciertos talentos". En septiembre aplicó un pago de US$ 100.000 para muchas solicitudes de ese tipo.
La conductora Laura Ingraham cuestionó la política migratoria laboral y afirmó: "Si se quiere aumentar los salarios de los trabajadores estadounidenses, no se puede inundar el país con decenas de miles o cientos de miles de trabajadores extranjeros".
Contexto legal
Según el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS), la ley permite que las empresas contraten trabajadores extranjeros a través de visas temporales cuando no consiguen cubrir esos puestos con solicitantes estadounidenses. La Organización Trump recurrió de forma reiterada a dos de estos programas: el H-2A, destinado a trabajadores rurales como los de su bodega en Virginia, y el H-2B, para empleos en el sector de la hotelería en clubes como Mar-a-Lago.
Para utilizar estos programas, las empresas deben cumplir con una serie de pasos: primero deben conseguir la aprobación del Departamento de Trabajo, luego solicitar autorización al Departamento de Seguridad Nacional, y finalmente el Departamento de Estado emite las visas para los trabajadores extranjeros.
No está claro de qué países provienen los trabajadores extranjeros contratados por la Organización Trump. El Departamento de Trabajo no publica las nacionalidades de quienes acceden a las visas H-2A y H-2B, aunque ciudadanos de unos 90 países están habilitados para solicitarlas.
Antecedentes
Tres de las propiedades más visitadas por Trump —Mar-a-Lago y sus clubes de golf en Bedminster, Nueva Jersey, y West Palm Beach, Florida— buscaban contratar trabajadores extranjeros para 2025. Las dos primeras fueron investigadas por el Departamento de Justicia por presunto almacenamiento indebido de documentos clasificados, pero la causa se archivó tras su reelección en noviembre de 2024.
Trump puede seguir obteniendo ingresos de sus negocios mientras ocupa el cargo, a través del Fideicomiso Revocable Donald J. Trump, el mismo instrumento que usó durante su primer mandato. Él es el único donante y beneficiario, mientras que Donald Trump Jr. actúa como fiduciario. La Organización Trump confirmó en un informe presentado ante las autoridades regulatorias del Reino Unido en abril que Trump mantiene el control de sus negocios mientras está en funciones.
