Ben McKenzie, más conocido por sus papeles en populares series de televisión como "The O.C." y "Gotham", tiene una misión. ¿Su objetivo? El complejo mundo de las criptodivisas.

La incursión de McKenzie en el mundo de las criptodivisas comenzó durante los primeros días de la pandemia. Con la producción televisiva en suspenso y mucho tiempo libre en sus manos, empezó a leer sobre cripto por curiosidad. Cuanto más aprendía, más sospechaba. Vio similitudes entre la locura del cripto y las burbujas económicas del pasado.

Su formación es de actor, no de financiero, aunque es licenciado en economía. Pero en 2021, cuando las cripto y los NFT habían alcanzado un punto febril en EE.UU. y en todo el mundo, McKenzie vio la oportunidad de aprovechar su fama y emerger como uno de los críticos más reconocidos del cripto.

Escepticismo inicial

Actor experimentado, reconoció el poder de una historia convincente. Llegó a la conclusión de que las cripto, al igual que una superproducción de Hollywood, se estaba vendiendo por la fuerza de su narrativa más que por su sustancia. McKenzie dijo a CBS Mornings: "Las cripto, a fin de cuentas, son sólo una historia, o más bien una colección de historias". En opinión de McKenzie, se comercializaba como una forma de crear riqueza y democratizar las finanzas, pero consideraba que estas promesas eran vacías.

McKenzie declaró a The Guardian que llegó a una especie de epifanía mientras leía a su hija un cuento para dormir. La historia era El traje nuevo del emperador, y McKenzie dijo: "Había olvidado que el truco del sastre es apelar al ego y a la adoración del estatus". Así es como McKenzie veía el rápido ascenso de las criptomonedas en 2021 y las agresivas tácticas publicitarias y de marketing que alimentan la oleada.

La convicción anti cripto de McKenzie lo llevó a dar un paso audaz. Según The Guardian, apostó esencialmente 250.000 dólares a que el criptomercado se hundiría. Resultó que no estaba necesariamente equivocado, pero calculó mal el momento, lo que le supuso una pérdida considerable que tendría que explicar a su esposa.

"Fue una lección cara. Pero fue un lujo disponer del dinero para especular. Lo que más rabia me da es la venta de esta basura a personas que no pueden permitirse perder el dinero real que tienen, y la complicidad de la gente que lo hizo", dijo McKenzie.

Capitalizar el colapso de las criptomonedas

Armado con nuevos conocimientos y un sentido de propósito, McKenzie empezó a escribir artículos criticando a las celebridades que respaldaban a las criptoempresas y advirtiendo al público sobre los riesgos de invertir en monedas digitales. Su activismo culminó con su testimonio ante el comité bancario del Senado a finales de 2022, un acontecimiento notable en su improbable giro profesional.

"En mi opinión, la industria de las criptodivisas representa el mayor esquema Ponzi de la historia. De hecho, para cuando se asiente el polvo, las cripto bien podrían representar un fraude al menos diez veces mayor que el de Madoff. El hecho de que haya atrapado a decenas de millones de estadounidenses de todas las clases sociales, así como a cientos de millones de personas en todo el mundo, debería preocuparnos a todos", declaró McKenzie.

Dijo a CBS Mornings: "La razón por la que utilicé la palabra 'esquema Ponzi' ante el Senado es que un esquema de inversión sin valor es un esquema Ponzie. Esa es la definición, y los esquemas Ponzie están regulados por la Comisión del Mercado de Valores".

A partir de ahí, su impulso le llevó a ser coautor de un libro titulado "Dinero fácil: Cryptocurrency, Casino Capitalism, and the Golden Age of Fraud", con el periodista Jacob Silverman. El libro se anuncia como una inmersión profunda en el auge y la caída de la industria de las criptodivisas.

Kirkus Reviews califica el libro como "una crítica bien razonada y ocasionalmente estridente del universo de las criptodivisas". La reseña explica: "Escribiendo con el periodista financiero Silverman, McKenzie acusa a las criptodivisas de comportarse como un valor, y además no regulado, por lo que su precio "sube y baja como un conejo con anfetaminas". Además, la tecnología no se escala lo suficientemente bien, es desastrosa para el medio ambiente porque requiere mucha electricidad para 'minarla', y está rodeada de 'estafadores' y 'timadores'".

Aunque la cruzada de McKenzie contra el cripto está lejos de haber terminado, su viaje desde Hollywood hasta el corazón del mundo del cripto sirve como una llamada a la acción para que la comunidad del cripto combata estas narrativas negativas con honestidad, transparencia y una mayor educación en torno a las finanzas descentralizadas y la mayor aplicación del cripto al mundo de las finanzas.

“Dinero fácil: Cryptocurrency, Casino Capitalism, and the Golden Age of Fraud”, se publicará el 18 de julio.

Nota publicada en Forbes US.