La guayaquileña Mariuxi Zevallos y su padre tenían un plan: una vez graduada de la secundaria, ella estudiaría negocios en Estados Unidos para retornar al Ecuador y trabajar en la empresa de su papá, en el sector financiero. Zevallos tenía 18 años cuando se matriculó en la Universidad St. Thomas, en Houston, Texas. Allí estudió Administración de Empresas con una mención en Marketing.
El tiempo pasó y Zevallos se sentía cómoda en Estados Unidos, por lo que la idea de regresar al país fue perdiendo peso. Además, se enamoró y, una vez graduada de la universidad, empezó a buscar trabajo; en ese trayecto se presentó la oportunidad para ser parte de una compañía de títulos. En Estados Unidos estás empresas se enfocan en analizar los documentos de un inmueble, su legitimidad y así evitar sorpresas a la hora de una compra o una venta. “Me contrataron y así fui aprendiendo sobre bienes raíces. Una de los primeros conceptos que entendí fue el de los títulos de propiedad de viviendas”.
El amor y sus primeros pasos en el mundo del 'real state' marcaron el futuro de Zevallos. Por sus orígenes, la ecuatoriana se enfocó en un inicio en clientes hispanos; además se convirtió en una suerte de mentora de otras personas que empezaban en el negocio de inmuebles. “Explicaba lo importante de un título de propiedad, de un contrato de compraventa, si la casa tiene una deuda y otros temas. Yo tenía 23 años y muchas ganas de aprender, además, siempre quise mi propio negocio y me di cuenta de que en bienes raíces podía cumplir esa meta. Estoy acá casi desde los 18 años y se han abierto oportunidades increíbles. Estoy muy contenta”.
En sus inicios también hacía remodelaciones y 'flippings', es decir comprar una casa a un precio por debajo del mercado, para remodelarla y venderla tiempo después. “Eso me ayudó mucho para asesorar y crecer en bienes raíces”. El impulso que tuvo en los primeros momentos de su carrera profesional no ha decaído ni un solo día. Por eso hace ocho años obtuvo la licencia para vender bienes raíces en Houston; realizó un curso intensivo en Champion School of Real State. En esta certificación fueron clave sus estudios en St. Thomas para reducir el tiempo y para aprobar los exámenes. Zevallos estaba lista para iniciar una nueva etapa que la ha llevado a consolidarse como vendedora de bienes raíces.
Ella calcula que hasta la fecha ha logrado vender entre 80 y 100 casas en Houston y sus alrededores. Las propiedades que vende oscilan entre los US$ 400.000 y los 2 millones. Para lograr esto, Zevallos es disciplinada. Se levanta temprano, prepara a sus hijos de 14 y 12 años para que vayan al colegio. Luego se arregla y sale a la calle. El día transcurre entre reuniones con clientes, visitas a casas, capacitaciones, reuniones por Zoom o llamadas telefónicas. “Me gusta enseñar casas, o muy temprano o al final de la tarde, porque la familia quiere ir junta a ver la casa, el papá y la mamá. No tengo una rutina fija, me estoy moviendo siempre por Houston, tengo llamadas”. Cada día puede visitar hasta cinco propiedades.
Para darse a conocer, la ecuatoriana se apoya en tres redes sociales: Facebook, Instagram y un poco de TikTok. “En la última estoy empezando porque el mercado así lo exige, pero la que mejor me funciona hasta la fecha es Instagram”. En esta última, sus posteos e historias son casi a diario y se la ve mostrando propiedades lujosas y modernas.
Zevallos es parte de Realm Real Estate Professionals, pero más se mueve como una profesional independiente. “Tengo un acuerdo de exclusividad, cuando alguien quiere mis servicios firmamos un acuerdo y la comisión es de alrededor del 3 %, del valor total de la venta”. Los clientes son familias de Houston, pero también muchos mexicanos que deciden invertir en esta ciudad del estado de Texas.
Practicante de yoga y fanática de viajar, Zevallos ya puso en desarrollo un nuevo plan como mujer de negocios. El año pasado fundó Indigo Property Services, firma que se dedicará a la administración de propiedades residenciales y comerciales. “En cinco años me veo con la compañía establecida y en crecimiento. El mercado se está estabilizando y hay mucha inversión extranjera”, asegura con la experiencia que le han dado más de dos décadas como una protagonista del real state. (I)