La noche de este lunes 19 de julio, la jueza Grimanesa Erazo decidió revocar las medidas cautelares que favorecían al ahora exalcalde de Quito, Jorge Yunda. Con estas medidas, Yunda buscaba evitar la remoción de su cargo, que fue aprobada con 14 votos por el Concejo Metropolitano de Quito, el pasado 3 de junio y, ratificada por dictamen del Tribunal Contencioso Electoral (TCE), el 1 de julio. Con esta decisión, se podría decir que las pugnas internas dentro del Municipio de Quito llegarían a su fin después de casi 45 días de aprobarse la remoción del personero municipal de su cargo.
La audiencia, realizada entre la tarde y noche del lunes, contó con la presencia del alcalde removido, quien permaneció cerca de una hora y tuvo que abandonar el Complejo Judicial, ubicado al norte de Quito. En palabras del propio Yunda, tuvo que abandonar la sala porque “se encontraba en indefensión” ante la ausencia de su abogado. Horas antes, Yunda solicitó el diferimiento de la audiencia, la cual le fue negada. Al mismo tiempo, la ministra de Gobierno, Alexandra Vela, pedía a Yunda que aceptara el dictamen del TCE, y que respetara a la ciudad que, anteriormente, lo había elegido. Yunda reprochó las palabras de la funcionaria, manifestando si esa era la postura del Gobierno del presidente Guillermo Lasso.
Las convocatorias fallidas
Durante la última semana previa a la revocatoria de las medidas cautelares, Yunda intentó convocar a varias sesiones de concejo. En una de estas reuniones, se pretendía elegir a una nueva vicealcaldesa y reemplazar en su cargo a Santiago Guarderas, quien es el siguiente en la línea de sucesión para asumir la Alcaldía de Quito, al ratificarse la remoción de Yunda. Sin embargo, dicha sesión fue cancelada por Yunda la noche anterior.
“¿Qué haces aquí, Jorge?” fue la cuestión que el concejal Juan Manuel Carrión le hizo al removido alcalde, al recordarle la decisión del TCE y que ya no era el burgomaestre de la ciudad. En aquella reunión, realizada el jueves 15 de julio y en un tercer intento, después de dos intentos fallidos de convocar a sesión extraordinaria, y ante una amenaza de destitución a los concejales opositores realizada por la procuradora encargada del Municipio, Gabriela Obando, se dio el enfrentamiento entre ambos.
Sin embargo, la sesión no concluyó ya que los concejales opositores a Yunda abandonaron la sala de reuniones del Concejo Metropolitano. A las convocatorias fallidas asistieron siete de los concejales, pertenecientes al bloque del correísmo, el cual se abstuvo de votar en la sesión que decidió la separación de Yunda de sus funciones. Mientras Yunda buscaba, sin éxito, instalar sesiones de Concejo, el entonces vicealcalde Guarderas y los concejales de oposición presentaban denuncias en contra de Yunda, por incumplir la sentencia de última instancia del TCE.
Finalmente, el sábado 17 de julio, se logró convocar a sesión del Concejo Metropolitano, con la presencia de los concejales de oposición. El único tema a tratar fue sobre las acciones del Municipio con respecto a la pandemia por el Covid-19, y las medidas que se tomarían ante la posible llegada de la variante Delta a la ciudad.
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Horas antes de la audiencia, Yunda había convocado a una nueva sesión extraordinaria de Concejo para este martes 20 de julio, para tratar ordenanzas de temas varios en primer debate, además de analizar los informes presentados por la Secretaría de Salud y la Secretaría de Movilidad. La misma noche de la audiencia, Santiago Guarderas asumió la Alcaldía de Quito. Mientras tanto, el alcalde removido se manifestó en su cuenta de Twitter, anunciando que solicitará medidas de ejecución “ante cualquier intento de tomarse la Alcaldía”. (I)
