Los NFTs dejaron de ser en una realidad para convertirse en un verdadero boom. Y en ese contexto fue que el arte digital comenzó a cobrar cada vez más relevancia, deviniendo en un nuevo modelo de negocio que rápidamente se popularizó alrededor del mundo. Esto ocurrió, a su vez, en un momento donde las galerías de arte, museos y exposiciones estuvieron cerrados por culpa de la pandemia.
Está claro que las monedas digitales, la descentralización y la colaboración -la Web 3- están redefiniendo las reglas del juego y los activos digitales están en un auge sin precedentes. Latinoamérica se está convirtiendo en el Sillicon Valley de la Web 3 y hoy más que nunca, tiene la oportunidad de ser el lugar más pujante del mundo en la materia, abriéndose un sinfín de posibilidades.
En este contexto, y bajo la premisa de incrementar la visibilidad de los artistas emergentes latinoamericanos y popularizar sus obras digitales, nace Carnaval, el primer marketplace de NFTs en Iberoamérica montado sobre la red de Bitcoin.
Tal como explican desde Paisanos, compañía argentina que colaboró en su desarrollo, Carnaval.art está orientado al criptoarte e incluye a todo su ecosistema: el negocio, los artistas, los coleccionistas y los usuarios de plataformas del rubro. Está conformada por una extensa colección de arte digital curado de manera exquisita cuyos autores son artistas que cuentan con el aval o sponsoreo de museos, galerías y personas de influencia en el mundo del arte, quienes también pasan a ser actores dentro de la plataforma.
Esta galería digital que tiene a Connie Ansaldi como CEO, viene a cumplir el propósito de brindar visibilidad a los artistas digitales iberoamericanos que tienen bajas posibilidades de venta de sus obras en mercados secundarios.
“Lo que me da mucho orgullo de Carnaval.art fue haber podido crear junto a otros founders increíbles el primer marketplace de NFT's de arte iberoamericano, altamente curado, físico y digital. Era importante para mi que hubiera arte físico, asegurado sobre la red de bitcoin. Y darles a los artistas latinos un marco de pertenencia”, le comentaba Ansaldi a Forbes Argentina hace un mes atrás.
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Por su parte, Paisanos profundiza diciendo que el gran diferencial de esta plataforma, además de su propósito fundacional, "es que está basado en la red de Bitcoin en lugar de Ethereum - la más utilizada para la emisión o “minteo” de NFTs-, permitiendo que los costos transaccionales sean más bajos y que personas con economías acotadas puedan integrarse en este mundo invirtiendo en arte digital, además de generar un gran efecto de networking con los Bitcoiners de todo el mundo”.
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El proyecto fue presentado el pasado 6,7,8 9 de abril en la Bitcoin Conference de Miami, posicionando a la Argentina como pionera de un proyecto prometedor. Las primeras obras ofrecidas en la plataforma - explican- son parte de una colección denominada Bitcoin Genesis Drop, que incluye las primeras 210 piezas de arte minteadas sobre la blockchain de Bitcoin, y que ya obtuvo sus primeras ventas a las pocas horas de su lanzamiento.
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Cuál es el diferencial de Carnaval
“Toda solución se construye sobre un problema. Ese problema era que todos los marketplaces de NFTs creados hasta el momento estaban montados sobre redes que resultan muy costosas para el arte latinoamericano, volviéndose casi inaccesible para la comunidad latina. Carnaval llegó para abrirle el juego a un montón de personas y popularizar el arte digital”, comenta Santiago Echazú, Cofundador de Paisanos.
En ese sentido, señala que la curaduría hace que “no solo se valide la veracidad de la obra, sino la potencia de la comunidad que está detrás de esa obra. En Carnaval están involucrados los artistas más trascendentes del arte digital latinoamericano, como la colombiana Soy Fira y el mexicano Alejandro Glatt”.
En relación al aporte que hizo Paisanos en Carnaval agrega: “El mayor desafío fue montar un proyecto de Web 3 sobre la red de Bitcoin. Nosotros pensamos Web 3 como un cambio cultural donde la gente intercambia valor y Paisanos, desde su fundación, es una empresa que busca generar valor en los proyectos más allá de la monetización del recurso básico. Queremos crear valor agregado sobre los productos que construimos. La Web 3 es muy fit con nosotros porque nuestro valor va a ser cuantificado en la comunidad que estamos creando”.
Exclusividad, arte y comunidad
Por el momento, el acceso a la plataforma está limitado a todos aquellos usuarios que cuenten con un código de invitación. Cada usuario de Carnaval dispone de una cantidad limitada de códigos para compartir a nuevos usuarios y de esta manera ampliar la red paulatinamente. Los códigos son renovables y, en caso de querer acceder a la plataforma y no disponer de una invitación por código, el usuario se puede contactar directamente con Carnaval para que lo ingresen en la lista de espera y le provea uno.
Una vez ingresado dicho código, el usuario únicamente deberá conectarse con una billetera virtual desde su computadora o celular. La plataforma cuenta con una amplia apertura que va desde la popular MetaMask a una docena de wallets que soportan la red de RBTC. La plataforma no pide completar datos personales, lo cual permite mantener cierto anonimato.
“Las transacciones se realizan mediante RBTC o Bitcoin o a través de un procesador de pago. RBTC es la cripto de RSK, una “sidechain” de Bitcoin, y equivale a un BTC. Gracias a la integración de la plataforma con la tecnología de RSK, se pudieron armar por primera vez smart contracts de minteo de NFTs sobre Bitcoin, seguros, rápidos y eficientes, explica Juan Pablo Jepik, Scrum Master de Paisanos.
“En cuanto al formato, Paisanos siempre prioriza atender a todas las necesidades de los players de la comunidad. Por eso, y con el objetivo de otorgarle protagonismo a las obras digitales, se creó la plataforma en formato desktop, pero responsive, para que las personas también puedan adquirir NFTs en Carnaval a través de su celular”, comenta Belén Lago, Product Owner en Paisanos.
Pensada para cada tipo de usuario
El proceso de Paisanos para desarrollar este producto involucra varias etapas antes de su lanzamiento. Específicamente, se ocuparon del diseño UX y UI de la plataforma desde cero partiendo desde el research.
Comenzando por una etapa de entendimiento y análisis (product discovery), investigaron y comprendieron el ecosistema del arte latinoamericano, como también los puntos fuertes y débiles de otras plataformas de NFTs para, a partir de este proceso, construir un sistema de diseño y funcionalidades (product thinking) y continuar hacia la última etapa de implementación e integración (product building).
“Carnaval fue un hermoso desafío para el equipo. La base desde la cual partimos en el proyecto fue idear y crear una plataforma única, que se diferencie del resto por su exclusividad y curaduría. A través del research y el proceso de entrevistas, pudimos recolectar información valiosa desde tres visiones diferentes: negocio, artistas y coleccionistas y usuarios de plataformas del rubro. Así, pudimos comprender qué era importante para cada uno de ellos y en base a eso construimos un producto que no sólo cumpla con sus expectativas, sino que además, le brinde a los usuarios una experiencia analizada y pensada en detalle, tanto en lo funcional como visual", Mariana López, Scrum Master en Paisanos..
Si bien todo el proceso previo al lanzamiento fue desafiante, durante la etapa de desarrollo sobrevino la responsabilidad mayor: integrar con la blockchain de RSK, lo cual implicaba un desafío enorme porque era la primera vez que una herramienta así se creaba o sustentaba sobre este tipo de tecnología. Sin embargo, con la colaboración de RSK, IOV LABS e IT ROCK lograron desarrollar el MVP en tan solo 3 meses.
Otro de los desafíos más importantes para Paisanos y Carnaval fue acompañar a la red de artistas en el proceso de entrenamiento sobre el ecosistema cripto, ya que para muchos de ellos era un universo completamente nuevo.
