La ecuatoriana que guía a líderes latinoamericanos
Irene Ancín creó un programa que busca asentar un nuevo estilo de liderazgo. En esta entrevista comparte con los lectores de Forbes Ecuador seis claves para construir equipos más humanos, productivos y sostenibles.

Daniela García Noblecilla Editora digital

A los 18 años, Irene Ancín cruzó el Atlántico con una maleta llena de sueños y la meta de formarse para comprender cómo las personas y las organizaciones pueden crecer juntas. En Pamplona, España, vivió más de una década. Estudió Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad de Navarra, donde también cursó una maestría en Comunicación Política y Corporativa. Más adelante, complementó su perfil con una especialización en gestión de organizaciones y desarrollo de talento en la escuela de negocios ESIC en ese mismo país.

Su carrera despegó en Europa. Trabajó en una consultora vinculada al grupo CaixaBank y luego en una incubadora de emprendimientos, donde trabajó en la gestión de calidad y desarrollo organizacional. Sin embargo, una propuesta laboral la trajo de regreso a Ecuador. 

Irene se incorporó a la Universidad Casa Grande como asesora de talento humano, donde asumió el reto de diseñar desde cero la estructura, los procesos y las responsabilidades del área de recursos humanos. Su misión era ordenar y fortalecer la gestión organizacional de la institución. "Tenía 29 años, sin hijos, con toda la vida por delante. Recibí una oferta interesante y decidí volver". 

Además de liderar la reestructuración del área de talento humano, Irene fue nombrada coordinadora de la carrera de Recursos Humanos y comenzó a impartir clases en programas de pregrado y profesionalización. "Llevo vinculada a la docencia más de 14 años". Durante ese periodo también obtuvo su doctorado en la Universidad Austral de Argentina. Tras casi tres años en Casa Grande, su trayectoria académica y profesional la llevaron a la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES). 

Allí fue decana de la Facultad de Humanidades durante casi ocho años. Asumió este cargo a los 31 años. Su función principal era ordenar, reestructurar y levantar la moral de un equipo, además de aportar con nuevas ideas.

Luego de varios años en cargos directivos, Ancín decidió dar un salto de fe y apostar por su propio proyecto. Invirtió US$ 20.000 para crear AZA Estrategia & Desarrollo, su consultora enfocada en acompañar a empresas y líderes a impulsar cambios "reales y sostenibles". "Fue una de las decisiones más difíciles de mi vida porque llevaba 18 años sin parar de estudiar y trabajar y renunciar a la estabilidad para emprender no fue fácil".

Esta experta se certificó en coaching ejecutivo y alineación de equipos en el Tecnológico de Monterrey, una decisión que tomó mientras se mudaba a Portugal junto a su esposo, su hija y sus dos perros. "Mi esposo me decía que no era el momento, pero sentía que tenía que hacerlo. Fue la primera vez que no lo escuché y tenía razón". Esa formación fue el impulso final para lanzar Polaris, su programa insignia de mentoría para líderes, que combina ciencia y experiencia para potenciar el liderazgo desde la esencia de cada persona.

Desde Europa maneja este programa que tiene una duración de 12 semanas y cuesta US$ 2.000. Su estructura incluye 60 horas de contenido grabado, sesiones grupales con un máximo de cinco líderes y tres sesiones individuales de coaching con Irene. El programa tiene dos objetivos: potenciar las habilidades de liderazgo —a través del autoconocimiento, la toma de decisiones, la creatividad y la gestión del cambio— y acompañar a los líderes en el desarrollo de un proyecto propio. En esta última parte colabora su socio, quien aporta metodologías y herramientas de innovación. Todo el contenido está alojado en una plataforma digital que fue creada y producida por Irene.

Aunque los primeros meses le tocó golpear muchas puertas y reconstruir su red de contactos, su trabajo empezó a crecer. Hoy, Polaris, asegura, es un referente en América Latina para líderes que buscan productividad, bienestar y resultados sostenibles. En 2024, la consultora facturó alrededor de US$ 100.000 luego de capacitar a más de 60 personas de Colombia, Panamá, Costa Rica, México, Perú. En total, ha acompañado a más de 500 líderes. "Hoy trabajo con equipos remotos y me siento más conectada que nunca". 

Irene Ancín convirtió su experiencia en una guía práctica para otros. Por eso, comparte con Forbes Ecuador seis consejos que, asegura, todo líder y empresario debería aplicar si quiere construir organizaciones más humanas, productivas y sostenibles.

1. Empieza por liderarte a ti mismo

El liderazgo consciente nace del autoconocimiento. Un líder que identifica sus fortalezas, reconoce sus áreas de mejora y trabaja en ellas, está mejor preparado para acompañar a equipos diversos y generar confianza. 

Insight Polaris: pregúntate qué tan consciente eres de cómo lideras y de cómo tu estilo impacta en los demás.

2. Reconoce y gestiona tus sesgos

Uno de los mayores obstáculos en equipos intergeneracionales es el sesgo de afinidad: rodearte o escuchar más a quienes piensan como tú. Un líder que reconoce este sesgo puede abrir espacio para integrar perspectivas distintas, lo que enriquece las decisiones y el desempeño del equipo. 

Insight Polaris: identifica a quiénes tiendes a escuchar más y asegúrate de incluir voces diferentes en la conversación.

3. Ajusta tu estilo de liderazgo al contexto y a las personas

No existe un único estilo que funcione siempre. Adaptar la forma de liderar según el desafío y las personas es esencial. Inspirarse en los estilos identificados por Daniel Goleman, visionario, afiliativo, democrático, coach, directivo, permite elegir el estilo idóneo. 

Insight Polaris: a los profesionales senior los motiva el respeto a su experiencia; a los jóvenes, la autonomía y la participación activa.

4. Construye confianza con comunicación y participación

La confianza no nace de los cargos, sino de la escucha y la coherencia.

Un líder que crea espacios para la participación logra que cada generación se sienta valorada y comprometida con el objetivo común.

Insight Polaris: evita trabajar solo con quienes te resultan más afines; el verdadero liderazgo consiste en integrar todas las voces.

5. Transforma los conflictos en oportunidades de aprendizaje

La diversidad generacional puede generar fricciones, pero también es fuente de innovación.

El conflicto bien gestionado permite encontrar soluciones más creativas y efectivas. Desarrollar habilidades de negociación y resolución de conflictos ayuda a convertir las tensiones en oportunidades de crecimiento colectivo. 

Insight Polaris: analiza los conflictos buscando los valores y las expectativas que hay detrás de cada postura; entenderlos te permitirá convertirlos en puntos de encuentro y no en barreras.

6. Reconoce las motivaciones y el talento de cada generación

Un líder que se toma el tiempo de conocer qué motiva a cada miembro del equipo puede asignar responsabilidades que maximicen su rendimiento.

Mientras algunos valoran la estabilidad y el reconocimiento, otros buscan propósito, desarrollo continuo o flexibilidad. Comprender estas diferencias permite diseñar equipos más productivos y cohesionados.

Insight Polaris: pregunta y escucha activamente qué motiva a cada persona; esa información es clave para alinear su crecimiento personal con los objetivos del equipo. (I)