Los objetos de deseo para Navidad, como el último modelo de juguete o un aparato electrónico, puede ser que no lleguen al Ecuador. Y si llegan, estarán a precios muy altos. La crisis en la cadena logística de mercancías y el encarecimiento de los fletes navieros amenazan el comercio navideño a escala global. Luis Eduardo Naranjo, gerente Económico de la Cámara de Comercio de Quito, analiza el impacto en el país. Los importadores y exportadores ecuatorianos tienen propuestas para aliviar la carga.
Los problemas en la cadena de suministros vienen desde el 2020 y se extenderían hasta el primer semestre del 2022, ¿cuál es el impacto en el comercio exterior del Ecuador, en una época prenavideña?
Es importante recalcar que este problema de la cadena de suministros o, como lo denominamos, el desbalance de la cadena logística, afecta a los exportadores e importadores. Por el lado de los importadores, esto se da principalmente porque muchos de los productos que traemos vienen de Asia y el encarecimiento de los precios marítimos han sido desde un 500% hasta 1.000%. Y eso lo vemos reflejado en los últimos tres meses del año, con más preocupación, ya que son los meses de mayor consumo y compra de bienes por parte del sector comercial para el 'Black Friday' y la Navidad. Lo que más se compra en esta época es vestimenta, electrónicos y juguetes y cada uno tiene su afectación. Los juguetes tienen un doble impacto, por el encarecimiento del precio del transporte y porque muchas materias primas que se usan en la fabricación de juguetes vienen de polímeros plásticos, derivados del petróleo. Con un precio del barril en US$ 85 y un flete hasta 1.000%, dependiendo la ruta, lo que va a pasar es que los productos no solo llegarán tarde sino con un aumento entre 10% y 30%.
¿Por qué el incremento del costo en los fletes llegó hasta 1.000% en los últimos tres meses ?
La cadena logística funcionaba antes como un reloj, dejaba y recogía productos y seguía su ruta, lo hacía eficiente, rápido y con menos precios. Ahora, como el Covid-19 afectó todo el consumo mundial y la recuperación ha sido distinta en todos los países, lo que ocasiona que muchas rutas no lleguen con la misma frecuencia. Prefieres ir a EE.UU., que tiene un consumo totalmente abierto, pero lo que está pasando en ese país es la sobresaturación de los puertos marítimos porque no tienen la capacidad operativa para atender. Lo que antes funcionaba perfecto hoy tiene estos huecos que todavía no se solucionan. Se habla que por lo menos hasta el próximo semestre del 2022, que se podría ver normalidad en las rutas, primero, en la atención de puertos y, obviamente, en los precios.
Ecuador, por ser una economía pequeña, frente a monstruos que tienen gran demanda, ¿está en el grupo de los perdedores?
Exactamente, los exportadores antes tardaban 10 días en conseguir fletes para enviar a nuestros principales mercados: EE.UU. y Unión Europea. Ahora demora hasta seis semanas en encontrar un cupo y esto incrementa los precios y tiene parados los productos, que en su mayoría son agroindustriales y se pueden dañar.
¿Esos retrasos pueden generar incumplimientos de los exportadores en la entrega de sus productos?
Puedes generar incumplimientos, tu precio se encarece y pierdes competitividad. Por ejemplo el brócoli, que es un sector cercano a nuestra Cámara, tiene como principal destino EE.UU., es congelado y hay que conectar el contenedor a la energía, eso genera más costos. Sus competidores son Guatemala y México que, al estar más cerca, pueden enviar hasta por vía terrestre el producto.
¿Aparte del brócoli, productos agroindustriales, como banano y camarón están afectados con retraso o problemas de cupos?
La semana pasada mantuvimos una reunión con los sectores más grandes, camarón, banano, cacao, flores, y tienen el mismo problema: el encarecimiento de su cadena logística. Lo que han hecho es buscar la manera de mantener costos y hacer las entregas sin perder sus mercados ya ganados. Además, tienen otro problema que es el incremento del precio del petróleo que encarece ciertas materias primas que utilizan, en los empaques que son plásticos, las cajas y otros insumos. Nos decían de la importancia del acercamiento del Gobierno para que entienda la problemática y sobre todo plantean como una solución la eliminación del Impuesto a la Salida de Divisas (ISD) en el pago de los fletes marítimos, como se hizo con los pasajes aéreos. Eliminar ese 5% puede aliviar hasta cierto punto. Para una empresa no solamente es difícil conseguir el flete sino que con un incremento del 1.000% le está restando liquidez porque paga de contado y directo.
¿Qué está pasando con los importadores?
Un importador grande de electrodomésticos nos ha dicho que todo lo que va a vender en diciembre lo tiene comprado allá, pero no puede traerlo porque no encuentra una ruta conveniente económicamente y va a esperar para traer el producto. En EE.UU. ya se habla de una escasez de varios productos.
¿Ecuador puede enfrentar escasez de productos electrónicos, ropa o juguetes?
Sí, se puede llegar a dar un tema de que se agoten los inventarios en muchos de estos locales de electrodomésticos y de electrónica, produciendo también un incremento por sobredemanda. Es un tema importante para analizar.
¿Para esta fecha lo que normalmente debía arribar para el ´Black Friday' y la Navidad ya está en el país?
Aún no llega en su totalidad como en otros años, que para esta época ya debía estar el 90% de los productos, y ahora no debe haber llegado ni el 50%.
Con los retrasos en la llegada de materia prima y encarecimiento, ¿se está afectando la producción nacional de juguetes?
Así es y es importante entender, ya que muchas personas nos han dicho, que esto de no poder importar puede ayudar a la producción nacional, es un sí y es un no. Puede beneficiar a la producción nacional si depende de materias primas importadas y maquinarias, además la mayoría de juguetes se importan. Viendo este sector y conversando con ciertas empresas nos decían que puede haber escasez, en el peor de los casos, o incremento de hasta un 30% en el valor de los bienes finales, un golpe al consumidor.
Algunos fabricantes asiáticos estaban buscando países donde levantar fábricas en centros cercanos a sus puntos de demanda.
No hemos conocido que algún proveedor nuestro esté en ese línea, pero sí hemos apoyado que una de las soluciones son los mercados de cercanía, hacer una sustitución de muchos de los productos que se traen de sitios más lejanos. Pero no es tan fácil levantar una fábrica de la noche a la mañana, además de la curva de aprendizaje que tienen esas empresas. Puede sonar como una solución, pero en el largo plazo no en tres meses.
¿Cuáles son las alternativas que han planteado al Gobierno?
Hay que entender que el Gobierno tiene una coyuntura bastante complicada, sin embargo hemos hecho ciertos acercamientos con el Ministerio de la Producción para que tenga eso en el radar. Una de las propuestas es revisar qué materias primas están en los procesos productivos de muchas empresas y que se pueda reducir el arancel; sería una solución en el corto plazo para aliviar el impacto. Del lado de los importadores se hablaba de eliminar el ISD para fletes marítimos y otra solución es excluir el costo del flete y seguro en el cálculo de los aranceles y el impuesto al Valor Agregado (IVA).
El 'Black Friday' será más negro, entonces, una fecha que había sido alto en ventas.
Esta fecha se lo estructuraba como un mes de movimiento de inventario, donde los descuentos aplicaban a productos con menos salida, ahora vas a mover inventarios en noviembre para ver qué tanto te quedará para diciembre. Ciertas empresas tenían hasta fin de año que vender US$ 30 millones pero en inventario US$ 25 millones y ahora tendrán que comprar US$ 5 millones en el país porque del exterior está muy caro.
¿Cómo proyectan el cierre del 2021 en las ventas del sector comercial?
Estimamos que se cerrará con un crecimiento del 15% en relación al 2020, pero si comparamos con el 2019 vamos a estar en un valor negativo entre el 1% y 2%. (I)