OpenAI podría estar gastando hasta US$ 15 millones al día en videos tontos de Sora
Unos cálculos rápidos sugieren que OpenAI está gastando más de una cuarta parte de sus ingresos en alimentar su fábrica de software de IA.
Unos cálculos rápidos sugieren que OpenAI está gastando más de una cuarta parte de sus ingresos en alimentar su fábrica de software de IA.
La apuesta por la energía nuclear como soporte del crecimiento de la inteligencia artificial disparó el valor de Oklo, una startup fundada por una pareja de ingenieros del MIT. Con respaldo político y vínculos con Sam Altman, la empresa vale más de US$ 21.000 millones, aunque todavía opera con pérdidas.
La compañía anunció nuevas funciones de protección tras la denuncia de una familia que responsabiliza al asistente virtual por haber reforzado ideas autodestructivas en un menor. Las autoridades regulatorias siguen de cerca el impacto de estas tecnologías en chicos y adolescentes.
La compañía de Sam Altman suma funciones de comercio electrónico a su chatbot y apunta a meterse en la pelea por las compras online. En Estados Unidos, ya se pueden adquirir artículos y se espera la incorporación de marcas que operan con Shopify.
Aunque las promesas suelen apuntar a cambios estructurales o revoluciones creativas, la mayoría de los usos cotidianos de la inteligencia artificial tienen más que ver con automatizar tareas básicas, resolver dudas rápidas y producir textos en tiempos ajustados.
La reacción de miles de usuarios forzó a la compañía a permitir que su popular modelo siga disponible para suscriptores pagos.
El nuevo modelo de OpenAI no solo sube la apuesta técnica, también desafía el equilibrio entre velocidad, precisión y costo, en una carrera global donde cada mejora redefine quién lidera y quién queda atrás.
La inteligencia artificial ya no solo resuelve ecuaciones o sugiere fórmulas: ahora es capaz de manipular tablas, cargar datos y hasta generar informes como si fuera un experto en tareas administrativas.
La herramienta estará disponible para los usuarios de ChatGPT Pro hoy, mientras que los usuarios de ChatGPT Plus y ChatGPT Team tendrán acceso en los próximos días.
La incorporación de sistemas conversacionales avanzados en las icónicas muñecas genera un dilema profundo sobre privacidad y desarrollo emocional. La promesa de interacción personalizada convive con el riesgo de convertir los juegos en un canal constante de vigilancia y recopilación de datos sensibles, mientras especialistas advierten que esta tecnología puede moldear vínculos y hábitos con una influencia que excede el entretenimiento.
La compañía fundada por Bill Gates evita detallar los números de su producto estrella en inteligencia artificial, mientras los creadores de ChatGPT y Claude muestran cifras millonarias que consolidan su liderazgo en un mercado cada vez más competitivo.
La plataforma dejó de responder durante la madrugada y la falla se extendió por varias horas. Aunque se restableció parcialmente, miles de personas continuaron con dificultades para acceder a los servicios de inteligencia artificial.
Desarrollado junto a cientos de médicos de todo el mundo, el nuevo estándar busca que los modelos puedan integrarse en la práctica clínica diaria sin perder precisión, respeten criterios profesionales y mantengan un rendimiento sostenido a escala global.
Una posible orden judicial por monopolio abre la puerta a que gigantes tecnológicos redibujen el mapa de acceso a la web con una adquisición inesperada.
El crecimiento vertiginoso de la inteligencia artificial disparó los costos de desarrollo y dejó a muchas compañías en una situación crítica. Mientras solo los gigantes tecnológicos pueden soportar esta carga financiera, otras empresas luchan por mantenerse en el mercado.
Los reguladores antimonopolio están preocupados por la posibilidad de que gigantes como el fabricante de chips Nvidia, Microsoft y Amazon obstaculicen a los operadores más pequeños.
El medio busca un camino legal para apuntar a OpenAI por escanear y utilizar piezas publicadas en el NYT para crear y entrenar las aplicaciones de IA generativa de la empresa, incluida ChatGPT.
Se suma a la carrera por desarrollar inteligencia artificial, enfrentándose a Google, Microsoft y Meta con una tecnología más confiable. Las nuevas funciones.
Muchas organizaciones están recurriendo a la IA generativa para que las ayude a desarrollar y ofrecer revisiones y comentarios a los empleados, aparentemente para impulsar resultados objetivos, claramente comunicados y basados en datos.