Millones de clientes de marcas de lujo quedaron expuestos tras un ciberataque a Gucci, Balenciaga y otras firmas del grupo Kering
El grupo francés admitió que hackers accedieron a nombres, correos, domicilios y cifras de consumo de su clientela. La filtración agrava el escenario para la empresa, que ya venía golpeada por la caída de ingresos y enfrenta un creciente riesgo reputacional.