'Gánale al sol': la filosofía con la que José Cusnia transformó su vida y sus negocios
A las 4:45 a.m., mientras la mayoría duerme, José Cusnia medita, reflexiona y planea. Ese hábito marcó el inicio de una historia que lo llevó de dormir en casas abandonadas a convertirse en referente del sector inmobiliario en EE.UU. Hoy comparte su método para alcanzar libertad económica.

José Cusnia encontró una rutina que le permite estar enfocado. Todos los días busca 'ganarle al sol' para regalarse un tiempo de meditación, lectura y reflexiones profundas sobre negocios y temas personales. Este tiempo, que arranca a las 4:45 de la madrugada, antes de que salgan los primeros rayos de luz, se transformó en una marca personal que le ha llevado a alcanzar el éxito en el mundo de bienes raíces, en Estados Unidos.

Su historia no empieza en el gigante del norte, sino en una comunidad indígena en Chimborazo. Nació en San Vicente de Jipangoto, donde tuvo una infancia humilde y trabajó como lustrabotas. En el 2008 decidió migrar y llegó a Estados Unidos en búsqueda de oportunidades laborales.

"Llegué como todos los migrantes. Sin dinero y sin trabajo. Para dormir me tocaba invadir propiedades que estaban abandonadas. Compartíamos espacios con otras personas", relata Cusnia.

La necesidad le hizo aceptar trabajos de alto riesgo. Empezó en el mundo de la reparaciones de casas. Hacía estuco en las construcciones. Poco a poco ganó experiencia en este negocio hasta encontrar libertad económica y abrir su primera empresa.

Las autoridades de Estados Unidos deportaron a un contratista experto en reparación de techos con el que vivía. Un día fueron a buscarlo y como nadie más hablaba inglés, vio la oportunidad y afirmó que él dijo que era el jefe. Nunca había cambiado un techo y no tenía experiencia en este oficio. 

"Esto de las reparaciones de techo es de alto riesgo y no todos lo hacen. Quien se mete a este negocio es porque de verdad necesita. Yo trabajaba para otro latino y luego lo hice de forma autónoma".

Así nació Best Connecticut Roofing, su primera empresa. En el 2011 se dedicó a la reparación y cambios de techos. Eso le permitió conocer a gente que le abrió espacio en las bienes raíces. 

Ese año compró su primera casa. La reparó y la puso en renta para que se pagara sola. Ahora cuenta con un patrimonio de US$ 15 millones solo en viviendas en Estados Unidos. 

Aprendió a negociar, a encontrar viviendas que podía adquirir y sobre todo entendió que ponerlas a la venta no era rentable.

"Si yo compro una casa por US$ 300.000 y después de los arreglos me ganó US$ 100.000, tengo que pagar 32% en impuestos. Eso ya no es rentable, pagarle 32 % de tus ganancias al gobierno no es rentable .. Pero si la pongo en renta, puedo generar dinero y que la propiedad se pague sola", afirma.

Esto lo aprendió con el tiempo. Se contactó con expertos en compra y venta de propiedades. También se capacita constantemente sobre negocios y formas de encontrar libertad económica. 

Ahora tiene 81 apartamentos y una comunidad de casi 2.000 emprendedores que acuden a su Hora Comunitaria. Todos los martes, de 18:00 a 21:00, se reúnen entre 100 y 200 personas para hablar sobre 'Cómo hacer dinero', crear empresas y encontrar oportunidades de negocio

Cusnia encontró en la mentoría una forma de gratitud. Disfruta compartir sus experiencias y enseñar a sus seguidores a cómo ser exitoso en el mundo de los bienes raíces. Empezó en YouTube y TikTok contando cómo adquiría casas y apartamentos por US$ 30.000.

Se hizo viral cuando contó que adquirió una propiedad por US$ 7.500 que se revalorizó a US$ 500.000. "Me dejé guiar por un amigo que me dijo que comprara una casa que tenía mucha deuda con la ciudad, que renegociara con las autoridades". 

La fachada de la casa estaba deteriorada. La deuda por multas con la ciudad llegaba casi a los US$ 150.000, acumulada durante 12 años. No había un comprador que se arriesgara hasta que apareció en el radar Cusnia.

Este emprendedor ecuatoriano se contactó con el dueño del inmueble y cerró su compra por US$ 5.500. Después acudió al ayuntamiento y renegoció la deuda. Pagó US$ 1.000 a la ciudad y otros US$ 1.000 al abogado que le ayudó con los trámites. 

"Era casi imposible que esa casa se vendiera, como también era difícil que alguien asumiera la deuda. La ciudad recibió una parte y el dueño pudo sacarse la casa que estaba en mal estado", dice orgulloso.

Entre reparaciones y gastos representativos invirtió US$ 120.000. Ahora esa vivienda está valorada en US$ 500.000 y le genera ingresos mensuales de US$ 5.000, por concepto de arriendo.

Toda esta experiencia se tradujo en una capacitación. Cusnia comparte sus vivencias con gente interesada en el mundo de bienes raíces. Incluso organiza grandes eventos con expertos. El próximo será del 17 al 19 de diciembre, en el Toyota Oakdale Theater, en Wallingford, Connecticut.

"Este va a ser un evento grande, pensado para gente que quiere ser parte de ese 1% que se atreve a buscar su libertad económica", afirma Cusna.

Los boletos están disponibles en el portal https://invierte.ganalealsol.com/ y van desde los US$ 260 hasta los $1.100. Cada categoría cuenta con su propia experiencia. 

"Tendremos a diez grandes de la industria de bienes raíces. Estará también presente gente que mueve el mundo de los negocios, entre ellos Luis Alfonso Chango", asegura Cusnia. (P)