La nueva movilidad es el enfoque de Clipp, una startup lojana que nació en 2016 con el nombre de Kradac y que hoy, seis años después, se encuentra en una fase de aceleración. Esta 'mobiltech' inició sus operaciones en el sur del país con un concepto sencillo: conectar personas con medios de transporte como taxis, buses, bicicletas y scooters.
La idea funcionó y se expandió rápidamente por otras ciudades del país. Loja, Machala, Cuenca, Riobamba, Ambato, Latacunga, Quevedo, Manta, Quito, Guayaquil, Ibarra, Tulcán, Santo Domingo, entre otras, se sumaron a esta solución de transporte. La 'app' sumaba seguidores y usuarios, así como reconocimientos como el que recibió en el congreso Latam Mobility 2020, en Ciudad de México.
Uno de los primeros hitos que logró Clipp fue en abril de 2017, cuando empezó a operar en Bolivia. ¿Cómo se dio la internacionalización? Bruno Valarezo, CEO de Clipp, cuenta que un ciudadano boliviano estuvo de paso por Loja y utilizó la 'app'. “Le encantó y fue el contacto que nos permitió empezar a operar allá”.

Luego se abrieron nuevos mercados y actualmente Clipp también brinda sus servicios en Colombia, Perú y México. En los cinco países en los que opera suma cerca de 800.000 usuarios (650.000 en taxis). “Hoy tenemos unos 5.000 conductores de taxis, 3.000 autobuses, 300 locales de comida para delivery y 50 'clippers' o repartidores entre motos y bicicletas. Estamos en 22 ciudades de cinco países de América Latina”, cuenta Valarezo con emoción.
En el crecimiento de Clipp, la pandemia -no podía estar ausente- también fue un factor que obligó a tomar decisiones. “Con el Covid-19, la movilidad se frenó y empezamos a dar servicio de entregas a domicilio de comida, de medicina, etc. Además incursionamos en los pagos electrónicos y en la venta de entradas a eventos. Ahora somos una 'app' de diferentes servicios”.
Para llegar a este punto Clipp apostó por un cambio de modelo tecnológico. Pasó del Mobility as a Service (MaaS) al Life as a Service (LaaS). Esto significa “servicios del día a día consumidos de manera digital en una 'app'”, en palabras de Valarezo. “Para evolucionar escuchamos mucho a los usuarios y creamos los servicios que ellos demandan. Así avanzamos y crecemos”, resume el CEO.
Con un equipo de 85 personas, entre la parte tecnológica, comercial y administrativa, Clipp se traza nuevos objetivos. La 'mobiltech' se encuentra en conversaciones con Startup Ventures para cerrar una ronda de inversión presemilla. Valarezo señala que con los inversionistas buscan no solo dinero, sino también 'know how', contactos y conocer nuevos mercados.
Los números dan fe de la evolución de la startup lojana. En 2021 facturó US$ 1,3 millones y este año espera superar los US$ 1,5 millones. “El año anterior solo en taxis hemos ayudado a generar un movimiento de US$ 15 millones y hemos gestionado hasta la fecha más de 35 millones de servicios. Día a día se transportan 2,4 millones de personas en los buses que cuentan con nuestra tecnología. Además, este año incorporamos el servicio de venta de entradas al estadio ya que somos auspiciantes del equipo de futbol Libertad Futbol Club, de Loja”.
Para 2023, la meta es afianzar la operación en Ecuador y digitalizar más procesos de movilidad. Clipp también está desarrollando un servicio corporativo para que las empresas brinden este servicio a sus ejecutivos y empleados, pensando en ahorro de recursos y tiempo. Además, en mayo de este año Valarezo viajará a Israel con una beca de la Alianza para el Emprendimiento e Innovación. “Allí la meta es hacer contactos, buscar posibles inversionistas y seguir creciendo”. (I)