MOOD encendió las primeras máquinas de su nave de 5.000 m² instalada en un predio de alrededor de 14.000 m² en El Pinar, en Ciudad de la Costa, justo al lado del desarrollo urbanístico denominado Aldea Pinar. La planta, dotada de una línea de producción importada de Alemania y diseñada para trabajar por estaciones de montaje, ya produce paneles y módulos en Cross Laminated Timber (CLT) que se ensamblan y se montan "en seco" en obra. La firma promete acelerar plazos, reducir costos y ofrecer viviendas personalizables con madera nacional certificada.
Los socios fundadores reúnen experiencia en la cadena forestal y el desarrollo inmobiliario; provienen de empresas vinculadas al procesamiento de madera y a la construcción industrializada, y trabajaron durante dos años en el diseño, la puesta a punto de la planta y la articulación de la cadena de suministro local. Esa trayectoria les facilitó cerrar acuerdos con proveedores nacionales y acelerar el proceso de montaje hasta llegar a la puesta en marcha de la nave en El Pinar.
Bruno Minicelli, CEO de la compañía, explicó a Forbes Uruguay que la fábrica tiene una capacidad inicial para entregar cerca de 1.200 m² de viviendas por mes en un turno de trabajo, y que esa capacidad puede ampliarse con nuevos turnos o una segunda planta. Según el ejecutivo, la industrialización permite ofrecer plazos y precios cerrados: "Si te digo que esto cuesta X, se cierra en ese precio", explica.
La puesta en marcha demandó una inversión ubicada "en el entorno de los US$ 10 millones", según Minicelli, cifra que incluye el montaje, la maquinaria y la adecuación de la nave. La empresa incorporó alrededor de 25 operarios en planta y otros 12 puestos en áreas técnicas y comerciales
Producción, tiempos y oferta
MOOD fabrica desde tiny houses de 38 m² hasta viviendas de hasta 300 m², con un alto grado de personalización. La arquitectura está pensada en módulos ensamblables al estilo LEGO, que permiten distintas configuraciones sin perder eficiencia productiva. En la práctica, la compañía asegura poder producir una casa de 100 m² en 15 días en planta, y que una vez en ritmo de crucero podría sacar una vivienda cada tres días.
En cuanto a plazos comerciales, Minicelli declaró que el tránsito completo desde la consulta inicial hasta la entrega se mueve en un orden de 75-90 días cuando existe cola de pedidos; sin cupo, los plazos se acortan sustancialmente respecto a la construcción tradicional in situ.
MOOD vende tanto a desarrolladores como a clientes particulares y al turismo (ejemplos incluyen pedidos para posadas en la zona de José Ignacio). Según Minicelli, la empresa ya había comercializado buena parte de su producción antes de encender la planta en setiembre y al día de hoy tienen "todo vendido hasta abril; antes de prender la luz ya teníamos los primeros cinco meses totalmente vendidos", afirmó el CEO.
Materia prima, sustentabilidad y mercado
El uso de madera es uno de los pilares del proyecto ya que la compañía trabaja con materia prima 100% nacional provista por Arboreal, con trazabilidad y prácticas de manejo forestal certificadas. Además, promueve sus ventajas de sostenibilidad ambiental en comparación con los procesos tradicionales de construcción.
"La construcción es responsable del 38% de las emisiones de carbón en el mundo... la construcción de madera hace todo lo contrario, secuestra carbón", dijo Minicelli.
MOOD incluso define su posicionamiento ambiental como "nearly carbon zero" y destaca que la producción en ambiente controlado reduce desperdicios y plásticos, al tiempo que facilita la economía circular y la trazabilidad de los insumos.
En términos económicos, la fábrica aspira a ofrecer una ventaja competitiva en costos, ya que el CEO sostuvo que el producto puede situarse alrededor de un 20% por debajo del costo por m² de una casa comparable, siempre que se excluyan factores externos como transporte de módulos, cimentación y permisos, que dependen de cada obra.
La empresa proyecta una producción escalonada cercana a los 6.300 m² en el primer año, 10.000 m² en el segundo y entre 13.000 y 15.000 m² en una etapa estabilizada, cifras que dependerán de la incorporación de turnos adicionales y del ritmo de ventas.