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En lugar de temer a Chat GPT y a la IA en general, debemos considerarlos como herramientas que pueden mejorar nuestra productividad y nuestra capacidad de abordar los desafíos del siglo XXI. Al recordar los paralelismos históricos con las innovaciones en la producción industrial, podemos apreciar que la tecnología, cuando se utiliza adecuadamente, tiene el potencial de impulsar el progreso.

09 Junio de 2023 15.38

En la actualidad, la inteligencia artificial (IA) se ha convertido en una fuerza omnipresente que impulsa la innovación y el cambio en todas las esferas de la sociedad. Una de las revelaciones más recientes de esta tecnología es el desarrollo de Chat GPT (Generative Pre-trained Transformer), un modelo de lenguaje basado en IA creado por la empresa OpenAI. Este último busca desarrollar y promover la IA, haciéndola amigable y beneficiosa para la humanidad. Sin embargo, a pesar de sus promesas y beneficios, es comprensible que muchas personas sientan cierto miedo y rechazo hacia esta nueva herramienta.

El miedo hacia Chat GPT y la IA en general puede ser atribuido en gran medida a la falta de familiaridad y comprensión acerca de cómo funciona realmente. Las preocupaciones sobre la pérdida de empleos y la amenaza de una IA "superinteligente" pueden nublar nuestra percepción de las posibilidades que estos avances tecnológicos pueden ofrecer. Sin embargo, es importante recordar que esta tecnología es simplemente una herramienta creada por seres humanos y que su función principal es asistirnos y mejorar nuestras vidas.

Un paralelismo interesante se puede establecer entre el impacto de Chat GPT y las innovaciones en las cadenas de producción de Henry Ford y Toyota en el siglo XX. En ese entonces, estos avances tecnológicos también generaron rechazo y preocupaciones sobre la pérdida de empleo y la deshumanización del trabajo. Sin embargo, a largo plazo, estas innovaciones resultaron en una mayor eficiencia, mayor productividad y la creación de nuevos empleos y oportunidades.

De manera similar, Chat GPT y la IA en general pueden ser vistos como una oportunidad para adaptarnos de manera más efectiva a las demandas del siglo XXI. En lugar de temer a la automatización, debemos considerarla como una aliada en nuestro afán constante de aumentar la productividad.

Veamos cómo Chat GPT puede ayudarnos a ser más productivos en nuestro día a día: 

  • Acceso instantáneo a información: de manera similar a cómo hemos utilizado Google durante años, con Chat GPT puedes formular tus consultas en su chat box y recibir una respuesta integral.
  • Traductor: pide a Chat GPT que traduzca un texto específico al idioma que necesites.
  • Fórmulas de Excel: pide a Chat GPT que te guie en la fórmula necesarias para tu trabajo en Excel. 
  • Análisis comparativo: imagina que necesitas comprar un producto específico para tu negocio y requieres realizar un cuadro comparativo. Pide a Chat GPT que los compare utilizando la información que le proporciones, o incluso que te sugiera opciones.
  • Asistencia en tareas rutinarias, como redacción de correos electrónicos: solicita a Chat GPT que te ayude a redactar correos electrónicos en el tono deseado, ya sea formal o informal, e incluso, con un acento regional específico. 
  • Inspiración: si eres emprendedor y no sabes qué publicar en tus redes sociales, puedes pedirle a Chat GPT te de ideas e incluso un guión adaptado al tipo de plataforma (YouTube, Tiktok, Reels). 

Es cierto que debemos abordar los desafíos éticos y sociales que acompañan a la IA, como la privacidad de los datos y la toma de decisiones sesgada. Sin embargo, no debemos permitir que estos desafíos nos impidan aprovechar al máximo las oportunidades que la tecnología nos brinda. En lugar de ver a Chat GPT como una amenaza, debemos considerarlo como una herramienta valiosa que puede mejorar nuestra calidad de vida y nuestra contribución a la sociedad.

Al igual que las innovaciones en las cadenas de producción, Chat GPT es un paso hacia adelante en la evolución de nuestra sociedad. Nos brinda la posibilidad de enfocarnos en tareas más significativas, fomentando la colaboración y la sinergia entre humanos y máquinas. Es crucial mantenernos abiertos al cambio y aprovechar los avances tecnológicos para avanzar como sociedad.

En lugar de temer a Chat GPT y a la IA en general, debemos considerarlos como herramientas que pueden mejorar nuestra productividad y nuestra capacidad de abordar los desafíos del siglo XXI. Al recordar los paralelismos históricos con las innovaciones en la producción industrial, podemos apreciar que la tecnología, cuando se utiliza adecuadamente, tiene el potencial de impulsar el progreso. Es hora de ver a Chat GPT como una oportunidad y abrazar su poder transformador en la era de la inteligencia artificial. (O)

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