Los emprendedores quieren solucionar problemas que para muchos no tienen solución, arriesgan su patrimonio, invierten su tiempo y el de sus familias. En su camino y con el tiempo desarrollan ciertos hábitos que les permiten enfrentar desafíos, acciones concretas que les ayudan a mantener un cable a tierra para no perder la perspectiva y para continuar con el enfoque de su negocio.
Los emprendedores son de carne y hueso, saben que los errores son parte del camino y los hábitos que generan son básicos para avanzar en sus ideas. A continuación se citan (sin dar nombres) algunas de esas costumbres que tienen los emprendedores y que las han compartido en distintos espacios.
- “Planificar la semana la tarde del domingo”. De esta manera el trabajo se organiza mejor, aunque siempre pueden existir cambios sobre la marcha durante la semana.
- “Pensar y actuar como si siempre estuviéramos en crisis”. De lo contrario el equipo de trabajo podría relajarse y cuando llegue una crisis de verdad el equipo no estará listo.
- “Dedicar un tiempo específico para responder correos electrónicos”. Puede ser al iniciar el día, al mediodía o en la tarde, pero siempre se recomienda darse una hora o el tiempo necesario para responder todos los e-mail.
- “Desconectarse desde la noche del viernes hasta la noche del domingo”. Este hábito que implica apagar el teléfono lo aplica el fundador de una startup ecuatoriana con un solo propósito: darle tiempo a su familia los fines de semana.
- “Salir de la oficina y subir una montaña”. Esta acción poco común permite que los colaboradores dejen la zona de confort, cambien la rutina y miren la ciudad y el negocio desde otra perspectiva.
- “Fijarme un sueldo acorde al momento del emprendimiento”. Muchas veces los emprendedores cometen el error de fijarse un sueldo antes de tener ingresos permanentes. Lo correcto es primero asegurar el salario el equipo. Si aún no hay ingresos se puede pagar con participación accionaria en la empresa.
- “Planificación de 'sprints' semanales en base a los objetivos trimestrales”. Esta acción permite saber cómo avanzan los equipos en el desarrollo de un producto o servicio, dónde hay demoras y determinar si el producto o servicio estará en el tiempo planificado.
- “Empezar la jornada resolviendo los asuntos más complicados”. La mente siempre está más fresca al iniciar el día y eso ayuda a enfrentar ciertos temas que en la tarde pueden ser más complicados de analizar y enfrentar.
- “Dedicar al menos una hora del día para un deporte”. La actividad física relaja la mente, permite mantenerse con buena salud y es otra manera de desconectarse de las responsabilidades diarias de un emprendedor.
- “En los momentos más duros hay que automotivarse”. Tutoriales en YouTube, películas y documentales sobre emprendimiento sirven siempre para saber que todo negocio pasa por malos momentos y levantar los ánimos. (O)