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El Cadillac Escalade IQL 2025
Lifestyle

Cadillac renace de la mano de Escalade IQ, su nuevo buque insignia eléctrico

Scotty Reiss

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Renovada desde sus cimientos, la Escalade IQL combina diseño imponente, autonomía sorprendente y detalles que apuntan al confort absoluto. Con este modelo, la marca apuesta fuerte a recuperar protagonismo entre los gigantes del segmento premium.

20 Octubre de 2025 07.25

Hasta no hace mucho, Cadillac enfrentaba serias dificultades. Su público tradicional dejaba de tener un auto, las ventas de su gama eran aceptables, pero lejos de destacarse, y los compradores de vehículos familiares de lujo contaban con múltiples opciones. A eso se sumaba que su promocionada línea de alto rendimiento no lograba convencer al mercado.

La reacción fue clara: mirar hacia adelante, desarrollar productos pensando en lo que viene y apostar a que el mercado acompañe. Esa estrategia empezó a dar resultados contundentes: uno de cada cuatro Cadillac que se venden hoy es un vehículo eléctrico, ocho de cada diez compradores llegan por primera vez a la marca y Cadillac se convirtió en una de las automotrices de eléctricos más grandes de Norteamérica. Está claro que todo lo que la compañía hace para reconstruir su base de clientes está funcionando.

La nueva hoja de ruta de Cadillac se apoya en una sólida gama de nombres: Lyriq, Optic, Vistiq, el ultralujo Celestiq y la Escalade IQ, el único modelo que trasladó un nombre ya conocido hacia el costado electrificado del catálogo.

Como buque insignia de Cadillac, su lugar en la gama de vehículos eléctricos era casi una consecuencia natural.

El nombre Escalade pasó al catálogo eléctrico por una razón clara: este modelo representa el halo de la marca, ese emblema que sostiene ventas y fidelidad incluso en tiempos difíciles, como la quiebra de GM.

Además, es el modelo en el que debutan muchas de las tecnologías innovadoras y funciones que luego se expanden al resto del portafolio de GM. En los últimos años, Cadillac introdujo pantallas táctiles que recorren todo el tablero, control de suspensión magnética, mayor potencia y el sistema de conducción manos libres Super Cruise. Estas funciones se extendieron a otras marcas del grupo, como Chevrolet, Buick y GMC, y terminaron replicadas por varios competidores.

La parte trasera del Cadillac Escalade IQL 2025
La parte trasera del Cadillac Escalade IQL 2025
 

El lujo moderno es estándar y la misión de Escalade IQ

Con precios que van desde los US$ 130.090 hasta los US$ 153.595 —en el caso del modelo tope de gama, el IQL—, esta SUV asume su rol de insignia con una mezcla de innovación y tradición. Busca llevar cada elemento al siguiente nivel, aunque sin perder lo que siempre definió a una Escalade. Esa es, precisamente, la lógica detrás del IQL, que corresponde a la versión de batalla larga.

Cada uno de los cuatro niveles de equipamiento (Luxury, Sport, Premium Luxury y Premium Sport) también cuenta con una variante "L", que agrega más espacio interior, mayor comodidad para los pasajeros y suma US$ 2.705 al precio del modelo IQ.

Más allá de las cifras, lo más destacado es que mantiene la presencia imponente típica de la Escalade. Tiene una distancia entre ejes más larga y una parte trasera más alta y cuadrada. En números concretos, mide apenas diez centímetros más que la IQ convencional, y el rediseño del sector trasero aporta solo 170 litros adicionales de carga detrás de la tercera fila. Sin embargo, el cambio visual es claro e indiscutible.

Desde ese punto, la Cadillac Escalade IQL suma capas de lujo al estilo clásico de la marca. Incorpora un sistema de entretenimiento en los asientos traseros con auriculares inalámbricos AKG, asientos eléctricos, una tercera fila amplia y estribos retráctiles que facilitan el acceso a la cabina para todos los pasajeros.

Como parte de su identidad eléctrica, el modelo utiliza cuero sintético especialmente desarrollado por Cadillac para esta línea. Aun así, la atención puesta en los detalles es tal que la mayoría de los ocupantes no notarán la diferencia. Mucho menos cuando se activen los asientos calefaccionados y con masaje, tanto en la parte delantera como en la trasera.

La cabina delantera del Cadillac Escalade IQL 2025 cuenta con una pantalla de pilar a pilar.
La cabina delantera del Cadillac Escalade IQL 2025 cuenta con una pantalla de pilar a pilar.
 

El primero en ofrecer una tecnología que no deja de evolucionar

Cuando Cadillac presentó el rediseño más reciente de la Escalade con motor a combustión, sorprendió con una pantalla frontal de 55 pulgadas que integraba el sistema multimedia, el panel del conductor y funciones clave como las luces delanteras y el odómetro parcial.

Pero con la Cadillac Escalade IQ, la marca fue un paso más allá: todo el tablero está cubierto por una pantalla de un solo panel, que incluye una sección específica para el pasajero.

Esta pantalla puede controlarse de manera táctil, mediante un dial en la consola central o por comandos de voz. Cualquier persona dentro del vehículo puede decir "Hola Google" y activar la interfaz para configurar la navegación, cambiar la estación de radio o hacer preguntas que se resuelven a través de la conexión con la nube.

Sin embargo, el sistema tiene una ausencia importante: no incluye Apple CarPlay ni Android Auto. A cambio, los usuarios pueden iniciar sesión con una cuenta de Google y acceder a mensajes y otras funciones mediante un perfil personalizado.

Para quienes valoran especialmente Apple CarPlay por su fluidez, esto puede implicar cierta adaptación. En cambio, quienes ya están familiarizados con sistemas como el de Tesla —que tampoco ofrecen estas integraciones— encontrarán la interfaz de Cadillac intuitiva y, probablemente, no extrañarán ver el contenido del celular en la pantalla.

La cabina del Cadillac Escalade IQL 2025 cuenta con asientos de cuero sintético y un techo corredizo panorámico.
La cabina del Cadillac Escalade IQL 2025 cuenta con asientos de cuero sintético y un techo corredizo panorámico.
 

La Escalade IQ proyecta la marca hacia el futuro

Uno de los puntos más destacados es la ingeniería de la Escalade IQ, que asegura una experiencia de manejo refinada. El modelo parte de una configuración con dos motores y tracción total de serie, y ofrece una autonomía que Cadillac promociona en más de 745 kilómetros. Sin embargo, algunos críticos y testers lograron superar ampliamente esa cifra, con recorridos de hasta 880 kilómetros con una sola carga.

El sistema de carga Ultium de Cadillac permite sumar hasta 160 kilómetros de autonomía en apenas 10 minutos mediante un cargador rápido de corriente continua de 305 kW, y también ofrece la posibilidad de recargar por completo durante la noche con un cargador de nivel dos.

Después, viene el manejo en sí. Gracias al control magnético de la suspensión, la suspensión neumática adaptativa y la dirección en las cuatro ruedas, la Escalade IQ garantiza una marcha suave y estable. Además, incorpora el "Modo Llegada", que permite al vehículo estacionar desde un ángulo cerrado aprovechando la dirección trasera. No alcanza la agilidad de un auto chico, pero lo que hace sigue siendo impactante.

Sin embargo, lo más impactante es la potencia que esta SUV entrega gracias a su batería de gran capacidad: 750 caballos de fuerza y 1.064 Nm de torque. Ese rendimiento le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos. Es más rápida que la versión V8 de la Escalade, que alcanza los 100 km/h en 6,1 segundos, aunque apenas por debajo de la Escalade V, que con sus 682 caballos de fuerza logra hacerlo en 4,4 segundos.

La consola central del Cadillac Escalade IQL presenta un diseño minimalista y metales texturizados.
La consola central del Cadillac Escalade IQL presenta un diseño minimalista y metales texturizados.
 

La Cadillac Escalade IQL es más fácil de manejar de lo que parece

Gracias a la dirección en las cuatro ruedas, las cámaras con visión periférica y una visibilidad bien lograda, la Escalade IQL no se siente torpe ni pesada, como muchos podrían suponer. Al contrario, conserva ese aire clásico de Escalade: una camioneta grande, con presencia, pero con una cabina silenciosa y una conducción suave, casi como si estuviera envuelta en una capa de confort.

Y consigue que te olvides de que se trata de un vehículo eléctrico. La Escalade fue pensada para ser lujosa y silenciosa, y la versión IQL cumple con creces esa promesa. También cumple con la idea de innovar y sorprender.

Si bien su precio, que ronda los US$ 100.000, la ubica fuera del alcance de muchos, la tecnología que incorpora ya empieza a extenderse a otros modelos de la marca, lo que permite que esas innovaciones lleguen a más usuarios. Aun así, la Escalade IQ tiene con qué lucirse: todo indica que el modelo alcanzará ventas superiores a los US$ 1.000 millones en 2025.


Nota publicada en Forbes US.

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