Estudiar en el extranjero es un anhelo de muchos. Eso lo sabe muy bien el ecuatoriano David Ponce, un joven que cumplió ese sueño y, no contento con eso, decidió crear una plataforma para ayudar a otros que también quieren cruzar fronteras para formarse como profesionales.

Ponce tuvo la oportunidad de estudiar Ingeniería Civil en el campus de New York University (NYU), en Abu Dabi, Emiratos Árabes Unidos. "Esa experiencia y haber compartido con culturas tan distintas me ayudó a ser versátil, tanto que ahora estoy en el sector de la educación". Él es cofundador y CEO de Dream, una organización que con tecnología trabaja acompañando y guiando a estudiantes que quieren estudiar en "las mejores universidades del mundo".

Esta plataforma es una idea de Ponce y su socio Santiago Bustamante, un colombiano-peruano que estudió en Stanford. "Los dos vivimos un proceso con más facilidades que el estudiante promedio, aun así hubo momentos de incertidumbre. Partimos de esos puntos o 'pain points' y creamos una filosofía, algo que nos hubiera gustado tener en nuestros procesos. Dream se pensó como un guía personalizado, cercano, experto que no solo ayude en la documentación, sino que sea una inspiración para hacer posible ese plan de estudiar en el extranjero".

Dream arrancó sus operaciones en enero de 2020. El mundo era diferente y el objetivo, desde el principio, fue guiar de manera presencial a jóvenes en su ruta hacia una suerte de internacionalización académica. Pero con la pandemia la plataforma dio el salto hacia la virtualidad.

El primer paso fue armar una red. Los contactos que Ponce y Bustamante tenían en NYU y Stanford fueron determinantes. Con recursos propios (cerca de US$ 20.000) la idea fue convirtiéndose en realidad. "Fue mucho prueba y error, ajustar la metodología para adaptar a la virtualidad. Uno de los retos fue mantener un contacto cercano con las familias y las instituciones de donde provenían los alumnos".

El primer grupo que recibió la asesoría y el acompañamiento de Dream tuvo unos 20 estudiantes de Ecuador, Perú, Colombia y Costa Rica. Ellos llegaron a Purdue University, Stanford y NYU.

¿Dream tiene convenios con las universidades? Ponce aclara que el trabajo de la plataforma es fortalecer el perfil del estudiante y guiarle para que arme una aplicación de primer nivel. "Las universidades a las que apuntamos no funcionan con reclutadores, son universidades con índices de aceptación del 3 % al 20 %. No requieren que alguien le contacte". 

Según Ponce, los jóvenes que capacitan llegan a las universidades como un estudiante normal, pero mejor preparados. A parte de lo académico, los estudiantes saben sobre presupuesto estudiantil, temas del día a día como el transporte y otras necesidades.

Desde 2020 la organización trabajó con unos 1.100 estudiantes. En 'university counseling' o la consejería universitaria se cuentan cerca de 500 aspirantes capacitados. Otros servicios incluyen la preparación para exámenes estandarizados como el examen SAT o el Toefl, así como apoyo en materias de bachillerato internacional.

¿Cuál es el negocio, por donde vienen los ingresos? Los ingresos, detalla Ponce, vienen de los planes que la plataforma ofrece a los estudiantes. "Tienen un fee de matriculación, lo que nos permite sostener el modelo de negocio que involucra la parte operativa. Los tutores se llevan un porcentaje".

En 2023 los ingresos de Dream llegaron a US$ 245.000 y este año del cálculo es cerrar con US$ 265.000. Con un equipo de seis personas y 20 tutores, Dream trabaja en Ecuador y Perú, pero también tiene estudiantes de Chile, Colombia, Costa Rica y México. "El 5 % viene de familias latinas en Estados Unidos", cuenta Ponce. Y al hablar de las universidades que despiertan mayor interés dice que son las que están en EEUU, Reno Unido, España y Países Bajos. 

"Técnicamente no podemos garantizar el ingreso a una universidad. El servicio se enfoca en potenciar las habilidades de los estudiantes y en reducir las probabilidades de no ser aceptados". Y suelta otro dato: "el 70 % de los estudiantes que nos han buscado accede a una universidad top 100 mundial". (I)