Hace casi un año, en agosto de 2024, Jorge González empacó maletas rumbo a Ecuador con un desafío monumental: liderar Skretting, el brazo acuícola del grupo global Nutreco, responsable de alimentar a buena parte del camarón que el país exporta al mundo.
Actualmente, desde su oficina en una de las plantas industriales en Durán, este ejecutivo mexicano revela que se siente "como en casa", mientras comanda una operación que en 2023 facturó US$ 1.249 millones -según datos de la Superintendencia de Compañías- y que lo consolida como un gigante en la producción de alimento para camarón.
"Desde que llegué, me he sentido en casa. Sinceramente, la gente ecuatoriana es muy cálida, similar a la mexicana", dice el gerente general de Skretting para Ecuador, Perú, Honduras y Panamá.
Jorge no llegó solo al país, aunque así empezó su travesía a Sudamérica. Primero se instaló para "tantear el terreno", mientras su esposa le dijo: "Ve tú primero y luego nosotros vamos". Hoy toda su familia está a su lado.
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Tiene 53 años, es oriundo de San Luis Potosí. Es médico veterinario zootecnista, egresado de la Universidad Autónoma de México, con una maestría en economía agrícola, que realizó durante la crisis económica de los años noventa que azotó a su país. La beca que lo llevaría a Estados Unidos quedó en suspenso, pero eso no detuvo su formación ni su vocación por el agro y la salud animal.
Antes de llegar a Skretting tuvo una larga historia profesional. Con 35 años en la industria de salud y nutrición animal terrestre y acuática, ha pasado por compañías como Pfizer, Novus Internacional, ADM y Cargill.
Estaba en Cargill, donde ocupaba un cargo regional, cuando recibió una llamada laboral. Era confidencial, solo le dijeron: '¿Te interesa? Luego entenderás por qué tienes que mudarte a Ecuador'".
Jorge aceptó escuchar. Cuando le revelaron el nombre de la empresa, se encontró con Skretting y una operación que lo sorprendió: cerca de 900.000 toneladas de alimento para camarón producidas en tres plantas en Ecuador, destinadas casi en su totalidad a la demanda nacional, y un mercado con más del 33% de participación local, que lo ubica como líder en la producción de alimento para camarones.
La clave del éxito de la industria, dice, está en un entorno productivo que no se detiene: "En Ecuador se produce camarón todo el año, algo que no ocurre en México. Eso da al país una ventaja competitiva natural".
"Por el clima, que permite cultivar camarón todo el año. En México solo tenemos dos ciclos y lo que se produce se consume localmente. Aquí los productores son grandes empresarios, con visión, comprometidos con la sustentabilidad y con alimentar al mundo".
Skretting tiene una capacidad instalada para un millón de toneladas al año. Funciona con una combinación de plantas que han sido modernizadas. En enero de 2025, empezó a operar la planta denominada Galápagos 2, una extensión de Galápagos 1, que tiene un sistema automatizado.
Las proyecciones de la empresa es que la demanda crecerá entre 10 % y 15 % anual. Y las inversiones anuales se calculan en US$ 30 millones por año. Skretting Ecuador produce una alimentación adecuada para cada etapa del cultivo del camarón, ya que cada fase presenta necesidades nutricionales específicas. La empresa cuenta con un portafolio de productos especializados para el desarrollo saludable y sostenible del crustáceo.
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¿Le gusta el camarón mexicano o el ecuatoriano? "Me gusta el ceviche ecuatoriano, hay más variedad, y fue de los primeros platos que probé". Aunque extraña la comida mexicana, las reuniones familiares, las parrilladas. "El tequila, no, porque acá sí hay buenas opciones y buenos restaurantes mexicanos".
Es la primera ocasión que sale de su país y espera quedarse por mucho tiempo en Ecuador. (I)