Bank of America habilita a sus 70 millones de clientes a invertir en criptomonedas, con una sugerencia concreta: destinar entre 1% y 4% del total de la cartera a activos digitales. La decisión marca un paso más en la integración de las finanzas tradicionales con el universo cripto.
La recomendación alcanza a quienes utilizan los servicios de Merrill, Bank of America Private Bank y Merrill Edge, ampliando el acceso a un sector que antes solo estaba disponible para los clientes más ricos del banco y bajo solicitud directa a sus administradores de cartera.
Además, el banco comenzará a cubrir cuatro de los cinco ETF de bitcoin más grandes por capitalización de mercado desde el 5 de enero. Se trata del Bitwise Bitcoin ETF, el Wise Origin Bitcoin Fund de Fidelity, el Bitcoin Mini Trust de Grayscale y el iShares Bitcoin Trust de BlackRock. Entre todos gestionan más de US$94.000 millones.
El avance de Bank of America se da en un momento en el que otras instituciones financieras como Morgan Stanley, BlackRock y Fidelity Investments también promueven el uso de productos vinculados a criptomonedas. Incluso Vanguard, el segundo administrador de activos más grande del mundo, permitirá operar con ETF y fondos mutuos centrados en criptoactivos en su plataforma de corretaje.

"Para los inversores con un fuerte interés en la innovación temática y que se sienten cómodos con una volatilidad elevada, una asignación modesta del 1 % al 4 % en activos digitales podría ser apropiada", sostuvo Chris Hyzy, director de inversiones de Bank of America Private Bank.
La apertura de estos productos a una base de clientes mucho más amplia responde al crecimiento sostenido del interés por las criptomonedas dentro de carteras diversificadas, especialmente entre inversores que priorizan instrumentos de alto riesgo y potencial rendimiento.
Aunque la volatilidad sigue siendo un factor clave, la incorporación de estos activos en recomendaciones oficiales por parte de bancos como Bank of America refleja una validación creciente del sector. En este contexto, la estrategia del banco apunta a ofrecer más herramientas de inversión sin dejar de advertir sobre los riesgos propios de este tipo de instrumentos.
Con información de Forbes US.