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Recomendaciones básicas para elegir a un líder

Ezequiel Palacios director asociado de Glue Executive Search

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No todas las personas destacadas tienen condiciones para el liderazgo. Qué capacidades son las más frecuentes entre los líderes para poder identificarlos en cada organización.

27 Junio de 2024 09.11

Elegir a un líder no es tarea fácil, porque no todos los equipos responden al mismo tipo de liderazgo y porque a veces se confunde el buen desempeño con la capacidad de liderar. De este modo, se elige como líderes a personas que se han destacado mucho en funciones previas, sin considerar que hay tareas que se pueden hacer con excelencia a pesar de no contar con competencias para el liderazgo. 

Un gran ejemplo al respecto es el de Apple. Steve Wozniak fue el gran ingeniero de la empresa, un visionario y hacedor de productos con una enorme capacidad para diseñar software y hardware. Pero quien vio la manera de convertir esos productos en un gigante de la tecnología fue Steve Jobs. También fue Jobs el responsable de identificar el potencial de los ingenieros de Apple y llevarlos a lograr objetivos que a ellos mismos les parecían imposibles. Wozniak era un genio, pero no era un líder. El estilo de liderazgo de Jobs puede ser cuestionado, pero su capacidad de marcar un rumbo y lograr que la gente lo siguiera es indudable. 

Siguiendo estos razonamientos, la primera cuestión que los decisores en las organizaciones deben tener muy claro es que no todas las personas destacadas tienen condiciones para el liderazgo. Lo segundo, entonces, es saber qué capacidades son las más frecuentes entre los líderes para poder identificarlos en cada organización.

El famoso psicólogo Daniel Goleman y su equipo pidieron a varios directivos senior que identificaran las capacidades que distinguían a los líderes más extraordinarios. Según este estudio, los líderes tienen que tener una serie de capacidades cognitivas (como la visión estratégica), pero el factor más relevante es la inteligencia emocional. Para Goleman, ésta se compone de cinco características:

Autoconocimiento: conocer las propias fortalezas, debilidades, valores, intereses e impacto en los otros;

Autorregulación: poder controlar o redirigir los impulsos y estados de ánimo perturbadores;

Motivación:  buscar logros como un objetivo en sí mismo y no por la retribución que puedan aportar;

Empatía: comprender la composición emocional de los demás;

Habilidad social: establecer relaciones con los demás para llevarlos en la dirección deseada.

Además de la inteligencia emocional, la experta en liderazgo Sunnie Giles ha identificado otras 4 características relevantes: la inteligencia conectiva, que es capacidad de conectar y trabajar bien con los demás, estableciendo relaciones sólidas y fomentando un entorno de colaboración; el pensamiento sistémico, que es la capacidad de ver el panorama general, entendiendo cómo las diferentes partes de una organización o sistema interactúan y se afectan mutuamente; la creación rápida de prototipos, que es la capacidad de probar y repetir rápidamente ideas y productos, aprendiendo y adaptándose en tiempo real; y la toma de decisiones ágil, que es tomar decisiones con rapidez y eficacia, a menudo con información incompleta, y ser lo suficientemente flexible para adaptar esas decisiones a medida que surge nueva información.

Mientras tanto, la escuela de negocios Northwest también destaca como características de los líderes la inteligencia emocional y la capacidad de tomar decisiones, pero agrega la visión y propósito, que es la capacidad de crear y comunicar la misión, visión y valores de la compañía; la capacidad de aprendizaje continuo; y la accountability, que consiste en dar cuenta de las acciones y decisiones que se toman. 

Otra experta, Erika Andersen, ha aportado una serie de preguntas que hay que hacerse al elegir una persona para una posición de liderazgo:

-¿Encaja con el negocio o la cultura de la organización? Tomemos el ejemplo del fútbol: algunos directores técnicos encajan a la perfección con la filosofía y estilo de juego de un club, pero no son adecuados en otros. Por ejemplo, Pep Guardiola encajó perfectamente en el Barcelona, pero tuvo algunos cuestionamientos en el Bayern Munich. 

-¿Está dispuesta a aprender? Los líderes deben adaptarse a diferentes situaciones, y aquellos que creen que lo saben todo tienen dificultades para hallar esta flexibilidad.

-¿Es alguien a seguir? El foco no sólo debe ponerse en la persona, sino en aquellos que lo rodean. ¿Los miembros de su equipo actual y pasado la siguen o se le resisten?

En resumen, saber cómo elegir un líder es casi tan importante como contar con personas con capacidades de liderazgo. Tener en claro las características frecuentes del liderazgo ayuda a tomar mejor esta decisión trascendental para cualquier organización. 


*La columna fue escrita por Ezequiel Palacios, director asociado de Glue Executive Search

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